Sí son cuentas de particulares, donde depositan cuotas voluntarias de escuelas

• Con eso las autoridades educativas se deslindan del destino de los recursos económicos, ya que su manejo se vuelve un acuerdo entre padres de familia

Las cuentas bancarias donde padres de familia de estudiantes que regresaron a clases para el ciclo escolar 2022-2023 depositaron lo correspondiente a “cuotas escolares” sí están a nombre de particulares y no de los directivos o de las propias escuelas.

Es decir, el dinero que las instituciones recibieron será administrado por los propios tutores o la comisión que ellos mismos designaron, por lo tanto, ya no es responsabilidad de los docentes velar por su aplicación, además, con esto la obligación de vigilar el dinero recae en quienes aportaron y serán ellos quienes deberán denunciar cualquier anomalía.

Sin embargo, al tratarse de una aportación por voluntad propia, quienes lo recibieron tampoco tienen la obligación de transparentar su aplicación, lo que se convierte en un arma de doble filo para los padres de familia y el motivo por el que las autoridades educativas pretenden eliminar estas prácticas.

Y es que, con cada ciclo escolar, las denuncias contra las sociedades de padres de familia de las escuelas no se hacen esperar, la mayoría de estas derivadas de la mala aplicación o administración del dinero de las cuotas escolares, pero que no proceden por la misma naturaleza en que el acuerdo se dio.

Por eso la insistencia por parte del secretario de educación pública de que las aportaciones sean a través de faenas u otro tipo de acciones y no con dinero, pero al parecer los tutores este año no pudieron hacer nada para evitar que las sociedades de padres de familia nuevamente cobraran altos costos por el mantenimiento de las instituciones educativas, a pesar de que ellos tienen la facultad de poner un alto.