Opinión

Mal y de malas…

  • Así comenzó la feria de Chiautempan, una elección de reina plagada de irregularidades y una «chiautempada» desangelada, la seguridad ni se diga, está por los suelos

Mal y de malas; así fue la percepción de las personas con respecto al inicio de la feria Chiautempan 2022, donde ni sus organizadores pudieron ponerse de acuerdo para ofrecer un buen espectáculo para los visitantes.

Desde el certamen para elegir a la reina ya se veía venir una seria desorganización, lo que se comprobó un día después a la hora de anunciar un evento taurino, pues el cartel fue publicado una hora antes de que este diera inicio, causando descontento entre quienes gustan de estas actividades.

No, bueno, mejor sí… así pareciera que decidió el jurado calificador a la reina, una joven que fue descalificada del certamen por haber caído en plena pasarela, luego, cuando las semifinalistas se anunciaron, decidieron agregar una más, precisamente a la que había sido descalificada por su mala actuación y, ante la sorpresa de todos, resultó ganadora.

Entre gritos y reclamos concluyó la elección, acusando fraude y señalando favoritismos, incluso se habló de que la elección de reina fue un negocio redondo, pues la triunfadora había sido reina de las Fiestas Patrias en el gobierno pasado y también aparecieron fotografías de ella representado al municipio de Apizaco en un concurso anterior.

Luego, el sábado, la “chiautempada”, una copia barata de la tradicional Huamantlada, fue organizada en algunas calles y, como era lógico, lució desangelada porque el anuncio apareció el mismo día en que esta se llevaría a cabo.

El ayuntamiento declaró saldo blanco, pero lo que más imperó fue la falta de seguridad tanto policial como para vigilar que personas en estado inconveniente saltaran las vallas para torear a las vaquillas.

Apenas transcurrió el fin de semana y ya quedó claro que el patronato junto con el ayuntamiento que encabeza Gustavo Romero no tuvo este año la capacidad de ofrecer a propios y visitantes la calidad de una feria que, si bien no es la más grande del Estado, sí se caracterizaba por tener eventos de calidad que hacían que el turismo visitara la fiesta en honor a Santa Ana.

Tanta fue la desorganización que nadie habló de los conciertos, ni siquiera los propios organizadores, a quien les quedó grande el evento y no han sabido darle una buena difusión para tapar los baches en los que cayeron desde el inicio.