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HAY REZAGO EN LA APLICACIÓN DEL MODELO NACIONAL DE POLICÍA Y JUSTICIA CÍVICA

  • Este considera que la articulación de las policías y la Guardia Nacional debe basarse en un esquema subsidiario que parte de los municipios.

Por José Luis Ramírez Romero

La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) buscará que la aplicación del Modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica se consolide en la entidad desde los municipios, a fin de mejorar la articulación de las policías.

De acuerdo a su titular, Ramón Celaya Gamboa, prevalece en el estado un notorio atraso en su implementación, por lo que, como parte de la estrategia para mejorar las condiciones de seguridad de Tlaxcala, se trabajará con los directores de seguridad pública municipales para aplicarlo “de una manera muy contundente”, tras recordar que “no es un tema de voluntariedad, sino de obligación legal”.

El Modelo Nacional de Policía considera que la articulación de las policías y la Guardia Nacional debe basarse en un esquema subsidiario que parte de los municipios, principalmente de los que cuentan con zonas urbanas con más de 100 mil habitantes o que tienen una policía municipal sólida y con un Estado de Fuerza y equipamiento suficiente para mantener la seguridad en su territorio.

En caso de que las policías municipales no puedan llevar ejercer cabalmente sus tareas, las policías estatales podrán llevarlas a cabo, y finalmente la Guardia Nacional, cuando ni el municipio ni el estado puedan sostener la función de seguridad pública, ni darle cobertura o eficiencia.

Lo anterior, sin menoscabo de las funciones propias y exclusivas de las policías estatales y de la Guardia Nacional en lo que se refiere al fuero común o federal según sea el caso.

La primera parte del Modelo consiste en cuatro componentes generales que incluyen un Sistema de Medición y Evaluación por Resultados -tanto para policías municipales como estatales-, Herramientas financieras para darle viabilidad, Estructura organizacional y participación ciudadana, y Elementos legales y normativos para su operación.

Y la segunda parte, implica los componentes específicos del Modelo, tanto para las policías municipales como para las estatales, y la Justicia Cívica.

Con base en el diagnóstico por el cual se desarrollo el Modelo Nacional Policial, el actual gobierno federal encontró que las instituciones de seguridad pública a nivel local, especialmente las corporaciones municipales, fueron abandonadas y, en algunos casos, prácticamente desmanteladas, durante las administraciones que lo precedieron.

Por ello, se advierte que las policías municipales están más expuestas a las dinámicas delictivas y de violencia cotidiana, así como a sus facilitadores y detonantes, por lo que ahora “es indispensable que los gobiernos municipales modifiquen su política criminal con base en diagnósticos de problemas de seguridad locales y, derivado de ello, implanten el Modelo Policial que permita enfrentar el problema de criminalidad con mayor efectividad, orientándose a la solución de problemas específicos de seguridad”.