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CAPACIDAD DE MUNICIPIOS ES INSUFICIENTE PARA LA ADECUADA GESTIÓN DE LOS RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS

  • La antigüedad y bajo número de unidades destinadas a la prestación de este servicio limita sus alcances.
  • Es inexistente una cultura de separación de residuos en la entidad; y los rellenos sanitarios incumplen las Normas Oficiales Mexicanas que regulan su operación.
  • Gobierno estatal prevé transitar gradualmente hacia una “economía circular” para mitigar los problemas asociados a la generación de basura.

Por José Luis Ramírez Romero

El problema en la Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) en Tlaxcala “comienza desde la inexistencia de una cultura de separación de residuos” en la entidad, así como en “la limitada capacidad para la recolección por parte de las autoridades municipales”, derivada de la antigüedad y bajo número de unidades destinadas a la prestación de este servicio.

Así lo indica un diagnóstico elaborado por el gobierno estatal, el cual atribuye también a las características operativas de los actuales sitios de disposición final de desechos el incumplimiento eficaz de las Normas Oficiales Mexicanas en la materia.

“Estas condicionantes provocan, por un lado, la contaminación de los mantos acuíferos con lixiviados, y por otro la disminución de la vida útil de los rellenos sanitarios por albergar productos que podrían ser objeto de reciclaje o reutilización”, señala el documento.

SOLO LA MITAD DE LA BASURA LLEGA A RELLENOS SANITARIOS.

Según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos naturales (Semarnat), en 2016, la generación anual de residuos sólidos estimada en el estado fue de mil 123 toneladas diarias, lo que ubicaba a Tlaxcala en el sitio 29 a nivel nacional en este indicador.

De dicho volumen, fueron recolectadas por los servicios municipales mil 058 toneladas diariamente, lo que indica un promedio de 94.3% de cobertura, y sólo fueron depositadas en los rellenos sanitarios 552.7 toneladas al día.

En ese año, la basura que llegó a los sitios de disposición final fue cercana al 50% de la generada, lo que sugiere que “una parte fue aprovechada por la selección informal, y otra fue depositada en tiraderos clandestinos y barrancas, debido entre otros motivos al alto costo que implica para los municipios transportarla a los sitios de confinamiento”.

De acuerdo con los resultados del cuestionario ampliado del Censo de Población y Vivienda 2020, el 95.59% de las viviendas particulares habitadas eliminó sus residuos mediante su entrega al servicio de recolección; el 2.10%, quemó su basura; el 0.35%, la dejó en un contenedor o depósito; el 0.22%, la dejó en la calle, en un río o barranca; el 0.17%, la tiró en un basurero público; y el 0.15% decidió entierrarla.

Lo anterior, advierte el patrón de comportamiento de los habitantes del estado, respecto a la forma en la que eliminan los RSU.

MUNICIPIOS REBASADOS.

Por otra parte, con base en los resultados del Censo Nacional de Gobiernos Municipales y Demarcaciones Territoriales de la Ciudad de México, en el 2018, el volumen de basura recolectado se incrementó 8.4% respecto al 2016, por lo que, con mil 148 toneladas, Tlaxcala se ubicó en el lugar 27, situación que implica que, debido a que al crecimiento de la población y al cambio en los hábitos de consumo, el peso y la composición de la basura ha venido cambiando.

En 2018, el estado tenía 181 unidades recolectoras para las necesidades de los 60 municipios; 59 fueron puestas en operación entre el 2004 y el 2008; 35 entre el 2009 y el 2013; 44 en el 2014 y años posteriores. Es así que el 55% de la flota de vehículos recolectores sobrepasaba los 10 años de servicio, lo cual indica la necesidad de algunos municipios de reequipar su infraestructura de recolección.

BASUREROS FUERA DE NORMA.

En lo relativo a los sitios destinados al confinamiento de RSU, Tlaxcala contaba con cuatro sitios para su disposición. El relleno sanitario de Panotla concentró el 69.9% de la superficie total, seguido del de Huamantla con el 15%, el de Tetla con el 7.5%, y Nanacamilpa con el 7.4%.

“En Huamantla confluye la basura de seis municipios y 14 industrias, lo que produce un ingreso promedio de 250 a 300 toneladas. Panotla tiene una extensión de 68 hectáreas, recibe de 550 a 600 toneladas diarias y atiende a 30 municipios y a más de 26 empresas. El relleno de Tetla de la Solidaridad recibe de 300 a 350 toneladas, provenientes de 18 municipios y 40 industrias. Por su parte, el de Nanacamilpa de Mariano Arista tiene una superficie de 7.2 hectáreas provenientes de seis municipios y cinco empresas, recibe de 100 a 150 toneladas”, expone el diagnóstico.

No obstante, los cuatro sitios de disposición final no cumplen con la NOM-083-SEMARNAT-2003, que establece los requisitos que deben reunir los sitios que se destinarán para un confinamiento controlado de residuos peligrosos previamente estabilizados.

TRANSITAR A UNA “ECONOMÍA CIRCULAR”.

Debido a que el impacto ambiental al suelo, aire y agua que se está generando en territorio estatal pone en riesgo la salud de la población y la situación del ambiente, el gobierno estatal prevé transitar gradualmente hacia una economía circular, “con acciones sobre el manejo responsable de los residuos sólidos urbanos y de manejo especial, con énfasis en las “siete erres”: rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar, recuperar y reciclar.

En tal sentido, la Gestión Integral de los RSU irá unida a una estrategia basada en evitar contaminar el medio ambiente, para lo cual “se realizarán campañas de concientización para sensibilizar a la ciudadanía respecto a la importancia del cuidado del medio ambiente”, y se promoverá “la reducción, el reciclaje y la reutilización” de la basura.

De igual forma, “se clausurarán los sitios que ya hayan concluido su vida útil y se establecerán las medidas para remediarlo; se ampliará la cobertura de las estaciones de transferencia, y la producción de subproductos a partir del material orgánico e inorgánico, con el propósito de destinar la menor cantidad de RSU a los sitios de disposición final”.

Las autoridades estatales reconocen que, aunque se realiza la disposición de los residuos de manejo especial, “existe déficit para su tratamiento”, por lo cual “el tratamiento de los residuos peligrosos se realiza a través de los procesos federales de confinamiento, reciclaje, otros hornos y oxidación térmica o incineración”.