Alto a fiestas y bailes populares masivos
PERSPECTIVA; OPINIÓN
Los altos números de contagios de COVID-19 en Tlaxcala, han puesto a trabajar a las autoridades de los distintos niveles de gobierno en el Estado.
Han pactado ir conjuntamente contra la rebeldía de la población de cesar las reuniones masivas en esta fase de Semáforo Rojo, que representa un riesgo de alto contagio del virus.
No es para menos, la cifra de dispersión del virus se ha disparado a un acumulado de 12 mil 893 casos positivos y mil 678 fallecimientos a causa del COVID-19.
En un día, la SESA ha reportado hasta 122 casos de personas contagiadas de coronavirus, es decir más de un centenar de casos positivos, que si está cantidad se mantiene contante por una semana, se estaría hablando de un escenario de poco más de 700 contagios en tan solo 7 días -de lunes a domingo-.
Desde finales de 2020 y los primeros 20 días de este 2021, cada fin de semana, incluso hasta en días hábiles, se ha convertido una constante la celebración de fiestas y reuniones masivas de personas en los 60 municipios de Tlaxcala.
Hasta bailes populares y sonideros se han desarrollado en plena fase roja del coronavirus. Las personas han decidido arriesgar su salud y hasta sus propias vidas por disfrutar unas horas de fiesta, que en su mayoría son de bodas, 15 años, y hasta patronales.
Las constantes reuniones masivas familiares y de festividades, han obligado a las autoridades estatales y municipales ha lanzar una advertencia de suspensión de todo tipo de conglomeraciones de gentes.
La Comisión Estatal para la Prevención de Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (Coeprist) y la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), han anunciado que serán quienes ejecuten todo tipo de suspensión de fiestas, bailes y reuniones que aglutinen a gran cantidad de personas, esto, en apego a las atribuciones que les confieren la Ley General y Estatal de Salud para suspender actividades que pongan en riesgo la salud de la comunidad.
El artículo 147 de la Ley General de Salud establece las acciones que se deben implementar para contener las enfermedades transmisibles.
Además con lo establecido en el artículo 411, procederán a la suspensión de servicios y prohibición de actos de uso que pongan en riesgo la salud de la población.
Mediante el artículo 417, hasta impondrán multas y en la Fracción Cuarta del mismo ordenamiento justificarán las medidas que se pueden imponer.
Estas autoridades estatales en coordinación con los 60 ayuntamientos, desplegarán todo un equipo jurídico y de verificación sanitaria de la Coeprist, que realizará todas las acciones que la ley faculta para tomar medidas que permitan disuadir cualquier actividad que ponga en riesgo la salud de las personas.
Esta es una clara advertencia para las fiestas y bailes populares masivos que todavía se siguen desarrollando en el territorio estatal, y para los que están programados en esta segunda quincena de enero de 2021.
Pero, ¿les alcanzará a estas dos dependencias el personal operativo para abarcar todo el territorio estatal para concretar la suspensión de fiestas y reuniones masivas?
Aunque es una acción que se debe hacer para frenar el alza acelerado de contagios positivos de COVID-19 en Tlaxcala.
Estos operativos de suspensión deberían iniciar en los bares y centros botaneros de la capital y de los municipios del Estado, pues si bien al resto de los comercios dedicados a otra actividad comercial que no es la comercialización de bebidas alcohólicas, se les han puesto medidas rígidas en cuanto al horario y número de asistentes, los bares siguen funcionando en completa libertad.
Esto, alienta a la población a desobedecer las medidas de prevención y realizar fiestas y bailes populares masivos.
En próximos días, se verá si este anuncio se concreta para disipar las reuniones masivas en las fiestas.
Y si hacer eco entre la población para posponer sus reuniones masivas, concientizando que no es momento de aglomerar a mucha gente.