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Por no tener licencias cierra ayuntamiento negocios en la capital, pero alcalde incrementa costo

  • Comerciantes se han quejado de que los costos subieron hasta 400%, no pretenden pagar esa cantidad

Desde hace unos días, el ayuntamiento de Tlaxcala ha comenzado a clausurar negocios y establecimientos que habían funcionado con normalidad y que, a decir de los afectados, ahora no cumplen con algún documento que solicita el gobierno municipal, por ejemplo, la licencia de funcionamiento actualizada.

Los trabajadores de Jorge Corichi también han argumentado la puesta en marcha de un supuesto reglamento que tiene algunas condicionantes que desde hace años no se tomaron en cuenta, la hora de expedir permisos de funcionamiento.

Sin embargo, pareciera que esto, más que aplicar la ley y hacer respetar el nuevo reglamento de comercio, tuviera otro trasfondo y este es, por todo lo que se puede ver, recaudar más dinero con algún pretexto o para alguna finalidad que, claramente se ha visto, no es para beneficiar a los capitalinos.

Y es que, luego de que comenzara el cierre de negocios por “incumplidos”, comerciantes y locatarios del mercado municipal, Emilio Sánchez Piedras y sus alrededores, han comenzado a denunciar el incremento del costo de las licencias de funcionamiento del municipio de Tlaxcala hasta en un 400 por ciento (%), es decir, 4 veces más de las que costaban anteriormente.

Además, acusaron que, desde el año pasado, cuando Jorge Corichi llegó al ayuntamiento, no se publicó un tabulador de costos, es decir, no tenían cómo comprobar cuánto costarían las licencias o permisos de funcionamiento, por lo que muchos decidieron no renovarlo hasta que se fije un precio.

Cuando en este 2023 decidieron hacer el trámite, se encontraron con que la tarifa creció hasta 4 veces más, coincidiendo algunos en que esto les afectaría su economía, y argumentando que el incremento de los impuestos no puede ser más alto que el de la inflación generalizada del país.

Sin fundamento legal, el gobierno de Jorge Corichi aplicó los nuevos precios, generando que varios comerciantes una vez más no pagarán el costoso documento, quedándose algunos sin la renovación de su concesión o el permiso para funcionar, lo que ahora ha traído consecuencias.

Los comerciantes catalogaron como una “trampa” los movimientos del alcalde, ya que primero subió el precio de los permisos a tal grado de hacerlos impagables y luego viene y cierra negocios a todos aquellos que no lo hayan renovado, por lo que ya solicitaron fecha y hora para encararse en una reunión donde expondrán la problemática, con la consigna de que si no hay una solución y no cede a apoyar a los negocios habrá solicitud de juicio político ante el Congreso del Estado.