OpiniónPORTADA

Iglesia se aleja del combate al COVID

PERSPECTIVA; OPINIÓN 

En el combate y prevención de contagios de COVID-19 en Tlaxcala, no todas las instancias caminan por igual.

Es decir, no todos los sectores trabajan de la misma forma para evitar que los casos positivos de coronavirus y las defunciones, sigan en aumento. 

En unos sectores se carga más el trabajo que en otros.

Entre la lista de instancias que han relajado las prevenciones de salud, se encuentra la Iglesia Católica de Tlaxcala.

En el territorio estatal, ya es una constante la celebración de fiestas y reuniones familiares, aún en la etapa de alto riesgo de contagio de COVID-19 en la que se encuentra el territorio estatal, al ubicarse en Semáforo Naranja.

Si no hubiera celebraciones religiosas en las Iglesias y Capillas que existen en el Estado, simplemente las Bodas, XV Años, Bautisos y hasta Confirmaciones no se llevarían a cabo en las comunidades.

Los sacerdotes, con la complacencia o no de la Diócesis de Tlaxcala, persisten con el desarrollo de misas, lo que motiva a las familias tlaxcaltecas envalentonarse para llevar a cabo sus grandes festejos con asistencia masiva de invitados.

Sin acto religioso no hay fiesta, así de tajo. 

Pero al persistir estos eventos sociales en el Estado, se delatan los propios sacerdotes, quienes se las ingenian para complacer y celebrar las Bodas, XV Años, Bautizos, confirmaciones y hasta las fiestas patronales en las comunidades.

Mientras autoridades estatales y federales, han establecido medidas restrictivas correspondientes a Semáforo Rojo hasta el 15 de febrero próximo.

Y cada fin de semana, cierran antros, negocios y desactivan fiestas y reuniones familiares masivas.

Por otra parte,  la Diócesis de Tlaxcala ha permitido la apertura de los templos y la celebración de misas religiosas hasta de 50 asistentes.

Ya sean misas dominicales como les llaman, y de fiestas como Bodas, XV Años, Bautizos, confirmaciones y fiestas patronales, se siguen efectuando.

En todo Tlaxcala, las Iglesias abrieron nuevamente sus puertas desde el pasado 3 de febrero, tolerando la presencia de personas en los edificios religiosos.

Con estas acciones, la Iglesia Católica en el Estado que encabeza el Obispo, Julio Cesar Salcedo Aquino, se aleja del combate al COVID.

Pues mientras autoridades de Protección Civil, Coeprist, Guardia Nacional y policía estatal, buscan desactivar los festejos sociales, en las Iglesias ya se desarrollan misas hasta de fiestas patronales con asistentes.

Como se dijo al inicio, la Diócesis tlaxcalteca parece que no trabaja por el mismo camino para que los casos positivos de coronavirus y las defunciones, se eviten en el Estado.