En Papalotla gusano descortezador llega a la zona centro

• Autoridades comenzaron acciones en el barrio de Potrero, un área afectada que se encuentra a en pleno centro, lo que habla de que la plaga ya se extendió a la zona urbana

En Papalotla, la plaga del gusano descortezador que afecta los árboles de pino y ocote, principalmente, ya no es exclusiva de la zona boscosa de la Malinche, pues en la cabecera municipal las autoridades emprendieron acciones para sanear los árboles de una barranca de la zona centro.

Personal del ayuntamiento tuvo que talar árboles afectados en la zona conocida como “Barrio del Potrero”, donde desde hace varios meses comenzaron a secarse debido a que el gusano descortezador los invadió; al no tener otra alternativa tuvieron que tomar esa decisión para que no se infectara una zona más grande.

A través de sus redes sociales, el ayuntamiento anunció que “para el gobierno de Papalotla es importante garantizar la salud de nuestras zonas forestales. Es por ello por lo que iniciamos el saneamiento de árboles ante la presencia de la plaga del gusano descortezador en Tecoyoc en el barrio de Potrero”, haciendo saber que los árboles fueron derribados.

Al mismo tiempo, invitaron a los ciudadanos de Papalotla que si detectan algún daño referente a este tipo de plaga informen para que sea atendido de manera inmediata y se evite la propagación.

La sola presencia del gusano descortezador en una barranca de la zona centro de la demarcación habla de que la plaga se ha extendido y de alguna manera ya dejó el bosque de la Malinche para afectar zonas urbanas, la probabilidad de que el escarabajo o gusano haya llegado varios kilómetros de distancia puede deberse, principalmente, a que fue transportado a través de madera contaminada.

Es sabido que derribar y talar los árboles infectados con el gusano descortezador no es la mejor ni mucho menos la más viable solución, ya que la madera contaminada o que contiene insectos debe ser tratada de una manera especial para garantizar que, durante su traslado, los adultos o larvas de la plaga no caigan en otras zonas y, a su vez, puedan llegar a un nuevo destino donde seguramente comenzarán a reproducirse.

Es decir que, aunque las intenciones del gobierno de Papalotla parecieran ser buenas, si no poseen los conocimientos y no aplican los métodos adecuados para combatir lo que se ha convertido en una amenaza forestal, seguramente solo contribuirán a que el gusano descortezador pueda extenderse a otras zonas y continuar afectando los árboles del municipio.