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Conflicto de Zacatelco pudo haberse evitado, si policías municipales hicieran su trabajo: Celaya Gamboa

  • El secretario de seguridad del Estado acusó que los policías municipales no actuaron para evitar que la población intentará linchar a presuntos ladrones; el director de seguridad municipal ni siquiera se presentó, señaló

El secretario de seguridad ciudadana en Tlaxcala, Ramón Celaya Gamboa, dejó entrever que el conflicto que se suscitó la tarde del sábado en Zacatelco y en donde pobladores de aquella demarcación amenazaban con linchar a integrantes de una familia acusándolos del presunto robo de una unidad del transporte público, pudo haberse evitado si la dirección de seguridad pública municipal hubiera actuado conforme a sus atribuciones.

Y es que dijo, las policías municipales son, en este tipo de eventos, los primeros respondientes debido a ser las autoridades más cercanas a donde se desatan los conflictos, y pueden ser mediadores para resolver en buenos términos las demandas ciudadanas, pero en el caso de Zacatelco eso no existió.

En entrevista colectiva, el jefe de la policía estatal acusó que los policías municipales no actuaron para evitar que la población intentara linchar a los presuntos delincuentes, a pesar de que entre los señalados había cuatro menores de edad, uno incluso de tres años.

“El protocolo de actuación para estos casos, de linchamiento, obliga a la policía municipal a participar, lo he señalado públicamente y lo tengo que decir, el papel de la policía de Zacatelco prácticamente fue nulo, el director de la policía municipal nunca se presentó, no se presentó en el lugar de los hechos pero tampoco se presentó a la procuraduría local para ponerlos a disposición, de hecho, los únicos dos policías municipales que se encontraban en la zona no querían ponerlos a disposición de la procuraduría porque decían que era un tema del juez cívico, que así se los había ordenado el director”, dijo.

Ramón Celaya lamentó la conducta omisa de parte de la policía municipal de Zacatelco, dado que ellos debieron haber sido los primeros respondientes; “ellos son los que tuvieron que haber contenido a la gente”, explicó.

El secretario de seguridad ciudadana destacó que la policía estatal haya llegado a tiempo para evitar que el conflicto escalara a un nivel más alto y hubiera vidas que lamentar, ya que entre los manifestantes había un grupo de personas en estado etílico y posiblemente bajo los efectos de alguna sustancia nociva que expresaron abiertamente la intención de quemar a los retenidos.

Justificó el uso de gas lacrimógeno y la detonación de un arma de fuego porque debido a esto el conflicto se contuvo en cinco minutos, de lo contrario, expuso, pudo haber personas lesionadas o hasta fallecidas debido a la turba que exigía justicia y a que algunos solo pensaban en lastimar y no en ejercer la ley.

Finalmente, declaró que el resultado fue medianamente bueno, pues a pesar de lo que sucedió no hubo más que daños materiales; “entonces si no lo terminamos en ese momento de manera contundente, la noticia sería de entre cuatro y cinco muertos, algunos menores de edad”.