Opinión

Avanza la reconstrucción de nuestro legado cultural


Por: Abel Cortes

En una notoria manifestación de compromiso, la gobernadora del estado de Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, presentó ante el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, los avances sobresalientes en la reconstrucción del preciado patrimonio cultural del estado.

Tras los devastadores sismos del 2017 que sacudieron la tierra en múltiples regiones del país, Tlaxcala no fue inmune a la devastación. Un total de 178 inmuebles históricos sufrieron daños, testigos silenciosos de la fuerza implacable de la naturaleza.

Sin embargo, bajo el liderazgo de la gobernadora Cuéllar, el estado ha demostrado un compromiso inquebrantable con la restauración de su herencia arquitectónica. Hoy, 146 de estos edificios, símbolos de la rica historia y cultura de Tlaxcala, han sido completamente restaurados.

En este magno esfuerzo de revitalización cultural, brilla con intensidad la restauración de joyas arquitectónicas como la imponente Basílica de Nuestra Señora de Ocotlán y el majestuoso Conjunto Conventual Franciscano y Catedralicio de Nuestra Señora de la Asunción. Estos monumentos no solo son testimonios de la destreza artística y la visión de nuestros antepasados, sino también pilares fundamentales en la construcción de la identidad cultural de Tlaxcala.

La respuesta coordinada y eficiente ha sido un espejo de la cooperación entre los gobiernos federal y estatal. La gobernadora Cuéllar ha trabajado en estrecha colaboración con la secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, para asegurar que el proceso de reconstrucción se lleve a cabo con la más alta calidad y profesionalismo.

La asignación de 236 millones de pesos por parte del Programa Nacional de Reconstrucción de Templos y Espacios Culturales ha sido un pilar fundamental para financiar estas labores imprescindibles.

La culminación de los restantes 32 inmuebles este mismo año nos llena de anticipación, representando no solo la restauración de edificios, sino la resurrección de la memoria colectiva de Tlaxcala. Esta incansable dedicación a la protección de nuestro patrimonio nutre nuestras raíces y proyecta una luz poderosa sobre el camino a seguir.

En Tlaxcala se escribe una historia de resiliencia, orgullo, y amor por nuestra historia, y en ella todos somos protagonistas.