Uniforme único escolar, buena medida para la comunidad estudiantil: Zenón Ramos  

• Lejos de ser una obligatoriedad se trata de una necesidad que permite identificar a los estudiantes y da seguridad a los niños y adolescentes 

Isabel Polvo 

El Uniforme Único Escolar fue considerado como una buena medida para la comunidad estudiantil, pues lejos de ser una obligatoriedad, permitirá identificar a los estudiantes y brindará mayor seguridad a los niños y adolescentes, consideró el dirigente Sindical de los Colegios de Estudios Científicos y Tecnológicos de Tlaxcala, Zenón Ramos Castillo. 

En ese contexto, expuso que los padres de familia y docentes deben tener claro la importancia de portar el uniforme escolar, puesto que es parte de la identidad de un estudiante y de pertenecer a una institución educativa. 

De modo que la implementación del Uniforme Único Escolar dará identidad a la o el estudiante, pero también a la propia institución educativa a la que pertenece; su implementación ha sido básica y necesaria en las instituciones educativas porque su origen parte del concepto de la igualdad y de abolir la discriminación al interior de las escuelas. 

Zenón Ramos Castillo, añadió que en materia de seguridad permitirá realizar una inmediata reacción en caso de ser necesario; se facilita su ubicación e identificación, de modo que con el nuevo uniforme único escolar se mantendrán esos conceptos. 

No obstante, también se busca que las economías familiares no se vean trastocadas, así como favorecer la economía de los pequeños empresarios textileros, puesto que se había convertido en un negocio para unos cuantos. 

Sostuvo que desde este subsistema educativo no se entrevé ninguna complicación para implementar el uniforme único a partir del próximo ciclo escolar, por el contrario, es bien percibido, por lo que las familias tlaxcaltecas seguramente adoptarán de manera generalizada, aunque de forma gradual. 

Es de recordar que, la producción del uniforme único escolar en Tlaxcala se contempla la participación de 47 talleres, que, aunque se enfrentarán a una capacidad económica limitada para empezar a confeccionar las prendas escolares, cada uno habrán de asumir el compromiso para elaborar las prendas que a su consideración puedan confeccionar para la comunidad estudiantil de nuevo ingreso. 

Si bien, los talleristas no podrán enfrentar un gasto “fuerte” para confeccionar los uniformes, se considerarán las piezas que se pueden vender, así lo comentó en su momento el representante de los talleristas, Aurelio Brindis Mellado.