Rechaza un grupo de paterfamilias contenido de libros de texto
- Pese amparo que prohíbe distribución de libros de texto gratuitos a nivel nacional, se distribuyó material, integrantes de la Red por la Familia comentaron que se está violando la ley
Isabel Polvo
Por considerar que los nuevos libros de texto para el presente ciclo escolar 2023-2024, imponen ciertas “ideologías”, en educación sexual integral, integrantes del “Frente por la Familia”, “Ser Familia” y “Red Familia, Padres y Madres de Familia” en Tlaxcala rechazaron su contenido, y no descartaron recurrir a los amparos para evitar que esa información no se retome en las aulas.
Respecto a la educación sexual “integral”, refirieron que no existe fundamento para decir que se van a reducir los embarazos en adolescentes, puesto que se trata de una clase que se imparte a estudiantes de primer grado de primaria.
Agregaron que los contenidos de los libros de la Nueva Escuela Mexicana tienen diversas anomalías, como el hecho de incluir el tema de la religión, pero no considera todas las religiones, pese a que la educación debe ser laica, explicaron .
A propósito, dijeron que existe un amparo interpuesto por Yadira Elizabeth Medina Alcántara, titular del Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa en la Ciudad de México, el cual fue concedido a la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) que ordena detener la distribución de los libros de texto gratuitos para el ciclo 2023-2024 y, además se pide usar los del periodo anterior.
Con ese antecedente, externaron que no importa que el ciclo escolar haya iniciado, pues el acto reclamado que es la no entrega de los libros como lo determinó la justicia federal no se cumplió, pues ya se distribuyeron los ejemplares. En ese contexto, se dijeron en desacuerdo por la omisión de la sentencia.
En conferencia de prensa los quejosos criticaron que los nuevos libros se hayan realizado con contenidos incompletos e incluso erróneos, ello previo a dar lectura a un posicionamiento en el que, solicitaron a los paterfamilias a aceptar los libros, pero para analizarlos, además de recurrir al amparo para que se regrese a los anteriores ejemplares.
Los inconformes comentaron que no van a convocar a quemar los libros, sino que buscan ejercer su derecho a educar a sus hijos.