Estado

Preocupa a Pastoral del Migrante y Albergue “Sagrada Familia” tráfico de personas migrantes en Tlaxcala

  • Con el reciente rescate de 726 personas migrantes en una bodega de Cuaxomulco, ese número se suma a las más de mil 150 que en el 2023 también fueron localizadas en diferentes municipios de la entidad

Isabel Polvo

Para la Pastoral del Migrante y el albergue la “Sagrada Familia” de la diócesis de Tlaxcala, observaron preocupante el tráfico de personas migrantes de Tlaxcala, ello después de que la Secretaría de Seguridad Ciudadana del gobierno del Estado hiciera oficial el rescate de 726 personas migrantes en una bodega localizada en el municipio de San Antonio Cuaxomulco el pasado 14 de enero del año en curso. 

Ese número de personas se suma a las más de mil casos registrados en diferentes municipios de la entidad durante el 2023, situación que podría constituir en tráfico de personas. Se consideró preocupante estas cifras que revelan un indicativo de la dimensión que está tomando en la entidad el tráfico de personas que cada día se agudiza. 

Del mismo modo, se lamenta las condiciones crueles, inhumanas y degradantes en las que son movilizadas las personas, poniendo en riesgo su integridad al quedar expuestas a la actuación de delitos como el secuestro, la trata de personas, la explotación sexual infantil y la desaparición de personas. 

Incluso, en los últimos años se ha agravado la violencia contra las personas migrantes quienes al enfrentarse durante su tránsito por la entidad por evadir los controles migratorios instalados en diversos municipios y así continuar su camino, muchas veces son captados por grupos de tráfico de personas. 

En ese contexto, se consideró como un desafío que este tipo de prácticas delictivas se estén arraigando en las comunidades de Tlaxcala, como lamentablemente ha sucedido con delitos como la trata de personas; por lo que hace necesario acciones para prevenir estás prácticas y construir en cambio, ambientes de paz y acogida.  

Por ello, exhortaron a las autoridades a mantenerse en el cumplimiento de sus funciones para garantizar la seguridad de todas las personas, incluidas las personas en movilidad, bajo estricto apego a la ley para proteger, promover y respetar los derechos humanos de todas las personas.  

Recordar que las 726 personas migrantes provenían de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua; entre ellas se localizó a 75 menores de edad no acompañados.