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Pega helada en santuario de Luciérnagas

La zona cercana al bosque de Nanacamilpa se cubrió de blanco, las baja temperaturas continuarán está temporada

Una helada, ocasionada por las bajas temperaturas que trae consigo el frente frío número 13, pintó de blanco el suelo y los árboles del bosque del santuario de las luciérnagas en Nanacamilpa.

La madrugada de ayer, el ambiente se tornó gélido en la zona alta de la demarcación, afectando también a las familias que habitan cerca, sobre todo de las comunidades de Tepuente, Miguel Lira y Ortega y San Felipe Hidalgo, principalmente.

Por la mañana, el campo lució blanco anunciando la llegada de la temporada invernal, y aunque el espectáculo fue digno de admirarse, también es de preocupación para los que menos tienen, pues en algunas ocasiones deben implementar medidas apresuradas para mitigar el frío.

A través de las redes sociales se difundieron fotografías de la comunidad de Tepuente y de algunas zonas donde se ubican los centros de avistamiento; los automóviles lucieron completamente cubiertos con una delgada capa de hielo, acompañadas de textos que explicaban el intenso frío que podía sentirse a la salida del sol.

Los centros de avistamiento no perdieron la oportunidad de publicar el espectáculo, recurrente en estos meses, para anunciar que los helados amaneceres y los paisajes blancos del bosque de Nanacamilpa son ahora un nuevo atractivo turístico que los visitantes podrán disfrutar.

Incluso, a través de sus redes sociales invitaron a turistas a visitar, con todas las medidas sanitarias, el bosque de Nanacamilpa para ser testigos de las heladas y disfrutar del amanecer con los campos y los árboles pintados de blanco.

Además, anunciaron que el clima de temperaturas heladas no afecta durante este tiempo a las luciérnagas, pues durante el invierno los insectos permanecen en su etapa larvaria y debajo de la tierra, por lo que ninguna helada los podrá poner en riesgo.

El frente frío número 13, que afectará el centro del país, provocará en varios estados, incluido Tlaxcala, temperaturas que van desde los cero a cinco grados centígrados, sobre todo por las noches y mañana, lo que propicia que actualmente la entidad resienta sus efectos.