Madres que se sacrifican y cuidan la salud de hijos que no son suyos

Han decidido de manera voluntaria no ver a sus hijos, pero diariamente cuidan a los tlaxcaltecas que padecen el Covid-19 en los hospitales tlaxcaltecas

No se abrió el portón de las escuelas, ni se escucharon los aplausos a las mamás, ni hubo bailables

Diariamente se levantan muy temprano para trasladarse a su centro de trabajo.

Toman las más altas medidas de sanidad en esta Fase 3 del Covid-19 para evitar infectarse, en los hospitales generales de Nativitas y San Pablo del Monte, habilitados en Tlaxcala para atender a las personas que han requerido hospitalización por las afectaciones a la salud del Coronavirus, incluso algunas de las madres que se desempeñan como enfermeras han decidido voluntariamente aislarse para no ver durante esta contingencia a sus hijos para no ponerlos en riesgo de que contraigan esta enfermedad.

Este 10 de mayo, Día de las Madres en México, fue muy distinto y complicado para algunas madres tlaxcaltecas dedicadas a la medicina por no poder abrazar, besar, acariciar a sus hijos, madres, hermanas por sacrificar su amor con tal de no contagiar a sus familias de Covid-19.

Convirtiéndose en madres que se sacrifican y cuidan la salud de hijos que no son suyos, y los enfermos pronto puedan volver a sus respectivos hogares. Estas mamás que se desempeñan en el sector salud y que cuidan a sus enfermos como si fueran de ellas, no solo están en los nosocomios del sur de Tlaxcala, también están en el los hospitales de Tlaxcala, de la Mujer, Infantil de Tlaxcala, de Huamantla, Calpulalpan y demás Centros de Salud de la Sesa.

Cuidando a pacientes que no son suyos por el bienestar de personas que padecen las complicaciones del Coronavirus en los dos hospitales de Tlaxcala.

Aunque México se convirtió en el primer país de toda América Latina en conmemorar un Día de las Madres desde 1922, este 2020 fue inusual por la pandemia que se vive en todo el mundo, México y Tlaxcala, miles de madres vivieron un “día normal” esperando a que se levante la contingencia para acudir a sus hogares y festejar a las mujeres que han dado vida desde sus vientres.

Enfermeras, doctoras y personal administrativo, ahora que está el pico más alto en la curva de contagios, fue complicado para ellas como madres ver a sus propios hijos, incluso algunas tuvieron que velar a pacientes que están hospitalizados por las complicaciones del Covid-19, en lugar de ser abrazadas por sus propios hijos por la felicitación del Día de la Madre, verlos jugar o ver una sonrisa en sus rostros tendrá que esperar.

En algunos casos, las madres que se desempeñan como enfermeras, doctoras, camilleras y demás puestos del sector salud, han dejado de ver voluntariamente a sus hijos todos los días, para evitar contagiarlos y poner en peligro su vida, solo escuchándolos por teléfono o sin saber de ellos platicándoles que todo va a estar bien aunque en algunos casos no lo entiendan.

“Pues todo lo que los pequeños quieren es a su mamá”, sabiendo con tristeza que están expuestas y en riesgo de adquirir el contagio de la enfermedad que hasta el pasado 9 de mayo dejó 361 contagios positivos de Covid-19, y 66 fallecimientos en Tlaxcala.

Caminando por los pasillos de los hospitales escuchando a los enfermos y sabiendo que las jornadas de trabajo son largas, cansadas y estresantes por las personas que no quieren saber del virus y que cuando se enteran que sus familiares lo tienen no lo creen, recibiendo insultos y reclamos de los familiares, tienen que continuar en su labor profesional hasta que la pandemia pase.

Sacrifico de las madres que se desempeñan como enfermeras, doctoras, camilleras y demás personas del sector salud que en estos momentos de la contingencia por el Covid-19, cuidan a los hospitalizados de Coronavirus, hijos que no son suyos para que lo antes posible recuperen su salud y puedan abrazar a sus mamás y seres queridos.

Además, las madres docentes son otro sector que en estos momentos se esfuerzan para llevar educación a los niños y jóvenes tlaxcaltecas,
“pasan la voz de por favor avisen a los papás que no tienen teléfono de las actividades que se les envían”, continuando con su labor docente esperando que el Covid-19 se retire del estado y puedan continuar sus actividades normales.

Este 10 de mayo también fue un día para recordar en la historia docente porque por primera ocasión las escuelas estuvieron cerradas, no se abrió el portón ni se escucharon los aplausos de las mamás sentadas observando los festivales, no hubo rifas para que las mamás se llevaran un regalo de rosas, licuadoras, plantas o chocolates, electrodomésticos y tampoco bailables típicos de la región para que las mamás se divirtieran y rieran a lado de sus hijos.

Este 10 de mayo no se ve mucho menos filas de mamás y maestras esperando su regalo o docentes recibiendo una rosa de sus alumnos, este año fue un año “negro” para todas las mamas maestras por el Covid-19, únicamente por redes sociales alumnos mandaron felicitaciones a sus maestras en su día esperando pronto volverse a ver.

El en un twitter difundido en redes sociales el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación( SNTE) felicitó en las redes sociales a maestras, doctoras, enfermeras y mamás que han entregado lo mejor en las escuelas y hospitales en el estado para cuidar en estos momentos a los pacientes que han dado positivo al Covid-19 en los hospitales del sur de Tlaxcala, cuidando a los hijos que no son suyos pasa que recuperen la salud y regresen a sus casas.