Inseguridad en Tlaxco cuesta la vida a director de obras
- Ciudadanos habían advertido sobre el alza a la delincuencia sin que el ayuntamiento tomara cartas en el asunto, la policía llegó hasta que pobladores de la colonia Ejidal reportaron los hechos
La inseguridad que impera en la calles de Tlaxco, y que el presidente municipal, Armando Flores López, se ha negado a atender, le costó la vida al director de obras públicas del ayuntamiento la noche del miércoles.
Habitantes de la cabecera municipal y las colonias de la periferia ya habían alertado a las autoridades sobre el alza delictiva durante los últimos meses, sin embargo, el alcalde había hecho caso omiso a la petición de reforzar la seguridad a través de recorridos policiales, error que trajo graves consecuencias.
Desde el inicio de su administración, los tlaxquenses pidieron, con argumentos y pruebas contundentes, que Armando Flores ideara estrategias para prevenir actos delictivos, ya que comenzaban a presentarse robos y asaltos en pleno centro del municipio, sin embargo y al no haber acciones, en medio año estos han incrementado paulatinamente.
Entre los casos denunciados existen robos de automóviles, negocios, casa habitación y a transeúntes, sin embargo, el del director de obras públicas demostró la gravedad de la falta de atención y en la que Tlaxco está indefenso, donde los ciudadanos son los más vulnerables por la falta de protección de sus autoridades.
La noche del miércoles, sujetos armados presuntamente a bordo de un vehículo rojo interceptaron en la colonia Ejidal la camioneta donde se trasladaba el funcionario municipal y dispararon en varias ocasiones en su contra, hiriéndolo de muerte.
Los vecinos, que se alarmaron al escuchar las detonaciones, salieron y descubrieron lo que había sucedido, por lo que llamaron a las autoridades y los servicios de emergencia; trascendió que cuando elementos de la policía llegaron el director de obra aún estaba con vida, pero cuando llegaron los paramédicos ya había fallecido.
El presidente municipal también llegó al lugar, pero ya era demasiado tarde, por lo que el área fue acordonada para no entorpecer la escena y que peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) pudieran recabar indicios.
Posteriormente, el Servicio Médico Forense (SEMEFO) hizo lo propio ante el descontento de los pobladores, quienes reprocharon que no haya seguridad en Tlaxco y que se vulnere la tranquilidad de las personas a través de hechos como este.
