Gana fe a pandemia en Huamantla
- Las alfombras que se colocan a diario en el atrio de la basílica son visitadas por un gran número de fieles; se elaboran por la tarde y se disfrutan al siguiente día
La fe que los católicos profesan hacia la Virgen de la Asunción, o Virgen de la Caridad, como ya es conocida, en Huamantla, se impuso una vez más a la pandemia por el coronavirus, y aunque las reglas han sido claras para evitar concentraciones masivas, este año no dejaron de festejar a la Santa Patrona.
Desde el pasado viernes, las alfombras elaboradas con aserrín, flores y arena de colores que se colocan cada día del mes de agosto en el atrio de la Basílica de Nuestra Señora de la Asunción, en el centro de Huamantla, nuevamente están ahí, para ser admiradas por los visitantes, pero, sobre todo, para exponer la devoción que las familias huamantlecas tienen hacia esta imagen.
Este año, cumpliendo con los protocolos sanitarios y obedeciendo las restricciones que el propio Obispo de Tlaxcala dictó para evitar posibles riesgos de contagios de Covid-19, los artesanos idearon la forma para expresar su fe, por eso desde el primero de agosto trabajan por la tarde y durante el día los visitantes pueden admirar su trabajo.
La condición fue no aglomerar personas mientras se elaboran las tradicionales alfombras, y durante el día solo podrán pasar de 50 en 50 personas al atrio para admirar el trabajo de los artistas; además de que para acercarse al lugar donde la alfombra es colocada, también se deben cumplir ciertas medidas, como mantener la sana distancia y utilizar cubrebocas en todo momento.
Las personas encargadas de elaborar el manto de la Virgen de la Caridad están afinando los detalles y en unos días este será entregado y puesto como cada año, y aunque se espera que la celebración religiosa donde se realiza este acto sea a puerta cerrada, las mujeres que un día encabezó “doña Carito” continúan, pese a la pandemia, la tradición de más de seis décadas.
En esta ocasión, la parroquia de San Luis Obispo también fue parte del inicio de las festividades y, para no concentrar a las personas, fue elaborado un tapete en honor a la Virgen de la Caridad en el techo del templo, justo a un costado del campanario.
El repique de campanas el 31 de julio y primero de agosto tampoco faltó; en punto del mediodía se realizó el evento que anunció el comienzo de las festividades religiosas y, aunque nuevamente habrá restricciones, como en 2020, la fe católica está presente en Huamantla.
