Estadísticas preocupan a empresarios
Si los índices de contagios no bajan no podrán regresar a laborar ni siquiera en junio
Las estadísticas que se han publicado en el estado y a nivel federal, y que muestran los avances del coronavirus en Tlaxcala, así como el número de personas fallecidas a consecuencia de esta enfermedad, han despertado la preocupación de empresarios del ramo automotriz, principalmente.
Si los índices de contagios no disminuyen como se tiene previsto suceda en unos días, y si por el contrario el número de casos positivos aumenta, las empresas en la entidad corren riesgos, ya que las previsiones que se tomaron eran para hasta el mes de mayo y aplazar el retorno a sus actividades traería consecuencias inciertas.
En el peor de los casos las pérdidas económicas serían el primer reflejo de una austeridad que podría tornarse grave, pues esta, para ser contrarrestada, significaría reajuste de las plantillas laborales que se traducen en pérdida de empleos.
La opción entonces sería regresar a trabajar como hasta ahora se ha proyectado, es decir, el próximo primero de junio, pero esto significaría, de acuerdo con las gráficas que se tienen hasta ahora sobre el comportamiento del virus en los tlaxcaltecas, exponer a los empleados a contagiarse incluso en el trayecto de su casa al trabajo.
En Tlaxcala existen empresas que surten productos a otras que se encuentran en otras entidades, y si éstas, por la necesidad de cumplir con los requerimientos de sus clientes entran en operaciones, estarían arriesgando la salud y bienestar de las familias tlaxcaltecas.
«Nos preocupa que por comenzar a trabajar se pueda contagiar uno de nuestros trabajadores, nos preocupa también que si en otros estados se reactivan las industrias y a nosotros nos piden cumir con nuestra parte no podamos hacerlo porque de cualquier modo eso significaría pérdidas y ahora no podremos soportar perder más», explicó el gerente de recursos humanos de una fábrica en la entidad.
Quienes ya comenzaron a planear están considerando reiniciar sus labores de manera paulatina, es decir, iniciar únicamente con los trabajadores esenciales y conforme a los requerimientos de sus clientes ir llamando a sus empleados hasta retomar el curso normal, lo que también dicen, puede tardar desde varios días hasta varias semanas.
Los empresarios tienen ahora el compromiso de planear de manera estratégica las acciones que pondrán en marcha para cuidar ambos flancos; por un lado mantener a sus trabajadores sin riesgos de contraer el coronavirus y por el otro mantener su cartera de clientes y hacerlos ver que, pese a la espera, la salud de las personas está primero.