En palabras, quedó atención a contaminación en Papalotla
Los vecinos pedían que las autoridades actuaran de inmediato, hasta hoy no ha habido respuesta y el agua se sigue ensuciando; el mal olor de la planta de alimentos es constante
En sólo palabras, quedó la promesa de atención a la contaminación en el riachuelo que cruza las comunidades de San Buenaventura y La Ciénega, en el municipio de Papalotla, las autoridades no han atendido el caso pese a que el alcalde, Jesús Herrera Xicohténcatl, prometió hacerlo de manera inmediata.
Los vecinos confiaron en que la reacción del ayuntamiento, al menos para detener la contaminación del agua, sería pronta; Jesús Herrera así lo dio a entender, sin embargo, a más de cuatro días de haberse hecho el acuerdo, las cosas continúan igual.
El problema de la contaminación del agua había sido denunciado desde hace más de tres semanas, pero fue la tarde del jueves cuando el conflicto detonó y le solicitaron al alcalde que se ponga a trabajar y atienda los llamados sociales.
Luego de que supuestamente un trabajador del ayuntamiento rompió un tubo de drenaje los ánimos se encendieron y bloquearon la carretera, advirtiendo a las autoridades municipales que de no ser atendidos ejecutarían acciones drásticas.
El alcalde se comprometió a atender la queja de manera inmediata. Durante el fin de semana los vecinos esperaron los trabajos, pero a cambio sólo encontraron que el agua del riachuelo sigue contaminándose; la empresa procesadora de alimentos, que genera mal olor, también lo sique haciendo.
Ahora, a través de una nueva denuncia, habitantes de La Ciénega y San Buenaventura acusaron a Jesús Herrera Xicohténcatl de solapar a la industria que sólo se encarga de generar focos de infección, pues además del olor, tira restos de animales a la intemperie.
El nuevo llamado es para que instancias estatales y federales tomen cartas en el asunto; el exhorto para que la Procuraduría Federal para la Protección de Ambiente (PROFEPA), la Coordinación General de Ecología del gobierno del estado (CGE) y la Secretaría del Medo Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) actúen, es inminente.
“Ya cerramos la carretera, manifestamos nuestra inconformidad al presidente y prometió que nos iba a apoyar, dijo que de inmediato se iba a arreglar el drenaje para que el agua dejara de contaminarse, pero no fue cierto, así que pedimos la intervención de las autoridades estatales y federales para que tomen cartas en el asunto”, expusieron.