Estado

EN ENERO ENTRARÁ EN OPERACIÓN LA NUEVA COORDINACIÓN DE BIENESTAR ANIMAL

  • Será un órgano desconcentrado de la Secretaría de Medio Ambiente, y estará dotada de autonomía técnica y de gestión.
  • Deberá conformar una Junta Directiva provisional para la aprobación de los lineamientos administrativos y financieros internos.
  • La diputada Marcela González destacó que ahora Tlaxcala cuenta con nuevas instituciones que responden a las necesidades actuales de la entidad en materia medio ambiental.

Por José Luis Ramírez Romero

La nueva Coordinación de Bienestar Animal deberá iniciar actividades operativas el primer día hábil de enero de 2023, por lo que la titular del Poder Ejecutivo deberá realizar las previsiones presupuestales necesarias, dentro de los recursos que se asignen a la Secretaría de Medio Ambiente del Estado (SMAE) en el Presupuesto 2023, para hacer efectiva su operatividad.

Dicha Coordinación fungirá como un órgano desconcentrado de la SMAE, y estará dotada de autonomía técnica y de gestión, a fin de “fomentar el cuidado, respeto, consideración, bienestar animal, así como su aprovechamiento para el ser humano, previniendo y erradicando su maltrato, actos de crueldad y sacrificios ilegales de los animales” que sean materia de la Ley de Bienestar Animal del Estado de Tlaxcala, aprobada la semana pasada por el Congreso local.

Una vez que entre en vigor esta ley, tras su publicación en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado, la Coordinación de Bienestar Animal deberá conformar una Junta Directiva provisional para la aprobación de los lineamientos administrativos y financieros internos, la cual tendrá funciones hasta el último día hábil de este 2022.

Además, la Coordinación, dentro de los 90 días siguientes a la publicación de la norma, deberá expedir su Reglamento interno.

La Coordinación de Bienestar Animal tendrá, entre otras atribuciones, la de rescatar y rehabilitar a los animales en situación de abandono, maltratados, lesionados, asegurados por autoridad competente o que no cuenten con un propietario; y devolver la salud a los animales atendidos, para salvaguardar sus comportamientos físicos naturales, asegurando la sanidad animal y la salud pública.

También, dar en adopción a los ejemplares que cuenten con características de comportamiento necesarias para insertarlos a una familia responsable, previo protocolo legal de adopción que establezca el reglamento de la Ley; y dar el seguimiento correspondiente de las adopciones realizadas.

La Coordinación también tendrá a su cargo el brindar servicio veterinario básico y de urgencia a bajo costo, para la población animal del Estado; dirigir y coordinar las actividades del Refugio Estatal de Bienestar Animal; y celebrar convenios con los centros de atención canina y felina estatal y municipales.

Para la diputada Marcela González Castillo, Presidenta de la Comisión de Medio Ambiente del Congreso del Estado, la nueva legislación en materia de bienestar animal implica, más que una actualización del marco normativo, una innovación en lo relativo a la regulación de la tenencia y manejo de animales, tanto de compañía, de producción, consumo y trabajo.

Refirió que, luego de 16 años sin que se legislara en la materia, la Ley de Bienestar Animal aprobada por la actual legislatura busca generar una cultura amigable y de respeto hacia los seres vivos, pero también prevenir delitos y una cadena de violencia en su agravio, al contar con nuevas bases legales para canalizar denuncias por maltrato animal ante las autoridades correspondientes. 

Como principal promotora de la actualización legislativa en materia de medio ambiente, la también coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena destacó que ahora Tlaxcala cuenta con nuevas instituciones que responden a las necesidades actuales de la entidad, como la SMAE, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado (Propaet) y la nueva Coordinación de Bienestar Animal que prevé la nueva legislación en materia de Bienestar Animal.

“Esto permitirá que los animales de Tlaxcala puedan tener una vida digna, en la cual, los tutores o responsables les provean y garanticen condiciones de vida de acuerdo a sus necesidades fisiológicas, teniendo pleno conocimiento de la responsabilidad que es tener un animal en casa, y de las obligaciones que adquiere una persona frente al animal que tendrá bajo su cuidado o resguardo”, añadió.