El desafío para acabar con el VIH es romper con el estigma social
Erradicar el VIH y acabar con la enfermedad es el objetivo en el que tienen puestos sus ojos expertas y expertos de todo el mundo, sin embargo, no será una tarea sencilla de alcanzar, sobre todo, porque el estigma en torno a la enfermedad prevalece, situación que impide que exista un registro lo más próximamente preciso acerca de su prevalencia pero, lo más importante es que mantiene a muchas personas que la padecen sin conocer su diagnóstico ya que, por miedo, no se someten a las pruebas para su detección, pues tan sólo en México más de 10 mil personas desconocen que son portadores del virus.
Para conocer el plan a través del cual se lucha por combatir la epidemia del VIH que, desde 1983, aqueja a la población mundial, EL UNIVERSAL sostuvo una conversación con Lauren Carey, la representante internacional de ViiV Healthcare, la única farmacéutica que, hasta la fecha, se dedica exclusivamente a crear medicamentos para tratar el virus de la inmunodeficiencia humana.
Fue así que cuestionamos a Carey acerca de cuál es el primer paso que debe darse para alcanzar los objetivos trazados, a lo que la experta estimó que, lo más importante, será aumentar la capacidad de diagnóstico de la enfermedad en todo el mundo, pues sólo cuando las personas sepan que padecen VIH podrán acceder a una terapia oportuna para que tengan más posibilidades de obtener resultados eficaces, ya que, como sabemos, su tratamiento eficaz depende, en gran medida, de la etapa en que el VIH es detectado.
«Es muy importante disminuir la transmisión viral, es un área de foco realmente importante, por lo que aumentar el diagnóstico es el primer paso», destacó Carey, que desde hace un año comenzó a involucrarse en conocer la incidencia (nuevos casos) y prevalencia (número total de casos) del VIH en México.
Además, Lauren no perdió de vista que las estrategias para disminuir la transmisión del virus tendrán que moldearse a la situación específica de cada región, sin embargo, hay una meta que cada país tendrá que alcanzar; aumentar el diagnóstico para que las y los pacientes de la enfermedad sean beneficiados con el tratamiento más eficiente para cada caso específico.
En lo que respecta a nuestro país, Carey no perdió de vista que, en la actualidad, existen alarmantes cifras acerca de los grupos de la población que desconocen que padecen la enfermedad, pues en los últimos años se ha notificado un aumento en los casos de VIH, alta que no se registraba desde hace más de una década.
«Es muy importante aumentar el diagnóstico y hoy día en México existen, aproximadamente, unas 10 mil personas que están viviendo con VIH y no conocen su condición, entonces este es un punto muy muy importante, que estas personas sean tratadas y no sigan transmitiendo la infección», destacó.
Otro punto crucial para combatir el VIH -destacó la especialista- es la prevención de la enfermedad, especialmente, en los grupos de la población que se encuentran más vulnerables a contagiarse y, aunque Carey no precisó qué factores podrían colocar a una persona en una posición susceptible y de riesgo, debido a que cada país cuenta con situaciones específicas que lo determinan, aseguró que es una de las incógnitas que ella y su equipo tendrán que desentrañar en un futuro no muy lejano.
Y aunque la aplicación de un tratamiento oportuno es esencial, pues han sido los fármacos antirretrovirales los que han logrado inactivar la contagiosidad del VIH en algunos pacientes, al menos en lo que se refiere al contacto sexual -pues la enfermedad sigue siendo transmisible a través del contacto con la sangre y la leche materna-, las y los expertos reflexionan que el gran desafío que aún queda por alcanzar es el de derribar las barreras que el estigma social ha impuesto en la sociedad.
Dicho estigma ha evitado que las personas se interesen, o si se interesan sea el miedo lo que las aleje de conocer su diagnóstico, pues evitan someterse al test del VIH, comportamientos que, a la larga, pueden poner en riesgo su salud y la salud de las personas que las rodean.
En este sentido, Lauren reconoció que, quizá, los objetivos trazados no estén tan cerca de alcanzarse, ni todas las regiones en el mundo lo lograran al mismo tiempo, sin embargo, echar hacia adelante las estrategias que comiencen a cobrar resultado es el camino para que cada vez estemos más cerca de acabar con la enfermedad pues, así como las y los expertos son clave para lograrlo, la concientización de la sociedad también es fundamental.