«Después hablamos», respuesta del ayuntamiento ante damnificados en Tetlatlahuca

Familias han perdido su patrimonio, algunas sólo muebles, otras su ganado; culpan a las autoridades por no limpiar las barrancas

«Después hablamos de esto», esa ha sido la respuesta que autoridades municipales de Tetlatlahuca dieron a las familias que perdieron su patrimonio por el desbordamiento de la barranca en la comunidad de Santa Cruz Aquiahuac, tras la tromba del pasado lunes.

Al menos 12 familias fueron las afectadas, algunas sólo presentaron encharcamientos en sus casas y sus muebles se mojaron, otros literalmente perdieron todo; camas, ropa, muebles y electrodomésticos se echaron a perder.

Quienes más resintieron los efectos fueron tres familias, una habría perdido 13 borregos que servían para crianza y venta de carne, algunos gallos de pelea y daños en su vivienda; otra no pudo rescatar todo el alimento para su ganado que acababa de comprar, el forraje que tenían reservado para las vacas lecheras fue arrasado por la corriente; la última familia se ha quedado sin muebles, el agua pudo subir más de un metro de alto y no pudieron rescatar nada, ni siquiera un ropero.

Entrevistados por ABC Tlaxcala, expusieron que «ojalá el ayuntamiento o la presidencia de comunidad nos apoyen, como puede ver somos familias humildes, que vamos al día y que necesitamos la ayuda».

Los habitantes de las viviendas más afectadas se dedican al campo, a la crianza, venta de ganado y a la elaboración de queso, como la mayoría de las familias de Aquiahuac; es decir, son personas cuyos ingresos van al día y no se pueden dar el lujo de perder lo que han logrado a base de esfuerzo y trabajo.

«Perdimos los borregos, los gallos de pelea, en dinero, fueron unos 80 mil pesos, afortunadamente los muebles no se dañaron, sólo se mojaron en la parte baja, se pueden recuperar, pero hubo vecinos a los que si les fue mal y perdieron hasta sus camas», dijo Arminda, afectada por la lluvia.

Ayer, más de 24 horas después de la tromba, los trabajos para poder retirar el lodo de los patios y la basura de la barranca que había sido afectada continuaban, los vecinos se organizaron en una faena para ayudarse mutuamente; la autoridad municipal encabezada por el alcalde, Antonio Morales Ramos, sólo pudo apoyar un poco.

Quienes habitan cerca de la zona afectada culparon a las autoridades municipales por hacer caso omiso a la hora de limpiar las barrancas; «la basura que había en la barranca vienen de Tenango, aquí recién limpiaron la barranca pero el agua vino con mucha basura, la barranca viene de allá», dijeron.

Tenango es la comunidad que se encuentra en colindancia con Texoloc, vecina de Aquiahuac y de donde viene la barranca en descenso, según dijeron, por eso la corriente había llegado con tal fuerza que la basura que llevaba pudo tapar el paso del agua y se fue para las calles aledañas.

El secretario del ayuntamiento, Adán Contreras Zárate, no quiso hablar ante este medio, argumentando que sería el alcalde quien daría una versión sobre lo ocurrido, pero los pobladores acusaron que no se había presentado siquiera para ser testigo de los daños, reforzando el dicho de que «a la autoridad no le interesa la situación del pueblo”.