Tras morir enfermero, familiares donan órganos, salvan 4 vidas
- Su familia cumplió uno de los deseos del joven que trabajaba en el IMSS de la loma; era de la primera línea contra el coronavirus y su misión fue siempre salvar vidas
Luego de la muerte de un joven de 22 años que se desempeñaba como enfermero del área de traumatología en el Hospital General de Zona número 01 del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) en Tlaxcala, familiares decidieron donar varios de sus órganos que ayudaron a salvar cuatro vidas.
Los padres y la esposa de Andrés Díaz, originario de Santo Toribio Xicohtzinco, decidieron cumplir uno de los deseos que en vida el joven había manifestado en varias ocasiones, incluso, los directivos del hospital donde trabajaba sabían que una de sus intenciones era que, al morir, donaran sus órganos.
Por eso, su corazón, hígado y riñones darán una nueva oportunidad a más personas; hace unos días fueron trasladados a la Ciudad de Puebla y la Ciudad de México, y de ahí serían llevados a su nuevo destino.
La intención de Andrés fue, antes de morir, de donar sus órganos funcionales a sus familiares directos que lo necesitaran, sin embargo, su esposa junto con sus padres tomó la mejor decisión al destinarlos a nuevas oportunidades de vida.
Ante tal acto, sus conocidos, amigos y compañeros de trabajo utilizaron las redes sociales para manifestar muestras de respeto y mensajes de agradecimiento, ya que, desde el inicio de la pandemia, en marzo de 2020, la donación de órganos funcionales se detuvo.
“Andrés, tuviste vida y diste más que eso”, puede leerse en uno de los mensajes que enviaron a su familia para despedir a quien, además de ser enfermero, estuvo en la primera línea de combate contra el coronavirus en el hospital de la capital.
“Hasta el cielo, honor a quien honor merece”, dice otro de los mensajes en las redes sociales para reconocer el acto sabiendo que las intenciones del joven eran, desde hace tiempo, seguir salvando vidas incluso si él se había despedido de este mundo.