Olvidan municipios seguridad en zona escolar de UPTx
- El compromiso de reforzar la seguridad en la zona solo fue mero protocolo, ni Tepeyanco ni Zacatelco atienden el área de bares
Municipios que convergen cerca de la Universidad Politécnica de Tlaxcala (UPTx) en el sur, han olvidado el compromiso de brindar seguridad a los jóvenes estudiantes, sobre todo en la zona de bares localizados en territorio de Zacatelco.
La postura del presidente municipal, Hildeberto Pérez, de mantener la vigilancia constante fue mero protocolo para tratar de aminorar los problemas que se venían suscitando hace algunos meses con respecto a las riñas y peleas en las que participaban los universitarios.
Incluso los operativos para detectar la venta de bebidas embriagantes a menores de edad y que se respeten los horarios de venta y consumo han cesado, a pesar del decreto gubernamental vigente y al que los ayuntamientos se comprometieron en vigilar que se respete.
La falta de protocolos de seguridad cerca de la universidad ha propiciado que desde el inicio del periodo de clases vuelvan los problemas, como la constante de observar a estudiantes en estado inconveniente desde la tarde hasta la noche, o los asaltos en las paradas del transporte público.
Lo anterior luego de que un alumno denunció que fue objeto de un robo por parte de los propios alumnos de dicha institución, pues presuntamente mientras esperaba el transporte en la colindancia entre Zacatelco, Tepeyanco y Axocomanitla, unos sujetos en estado inconveniente se acercaron para asaltarlo.
Señaló que lo golpearon y le arrebataron todas sus pertenencias sin que nadie pudiera intervenir y, pese a que los presuntos asaltantes iban bajo los efectos de alguna sustancia nociva y su equilibrio tanto como su coordinación motriz no estaban al 100 por ciento (%), la falta de elementos de seguridad evitó su detención.
Y es que, ninguno de los tres municipios que se unen en la zona han tomado cartas en el asunto; Tepeyanco, que es donde se encuentra instalada la universidad, no realiza rondines hacia la carretera Tlaxcala-Puebla, sino solamente hacia la comunidad de Xalcaltzinco y estos son esporádicos.
Axocomanitla, cuyos límites se encuentran a menos de un kilómetro de la universidad se desentiende de lo que pasa en el lugar y deja desprotegidos a los estudiantes y, por último, Zacatelco, que es donde se han instalado bares y cantinas pero que tampoco vigila, dando paso a que en la región la delincuencia pueda hacer de las suyas.