Ya hay variante Épsilon de Covid-19 en Tlaxcala
- Aunque la predominante sigue siendo Delta, ya se han detectado casos de la nueva cepa; Épsilon no es considerada de preocupación por su índice de mortalidad, pero debilita y destruye los anticuerpos que generan las vacunas
El secretario de salud en Tlaxcala, Rigoberto Zamudio Meneses, dio a conocer que en la entidad ya se han detectado casos de la variante «Épsilon» del SarsCov-2, descubierta en marzo de este año en California, Estados Unidos, y en abril en Colima.
Aunque la cepa predominante continúa siendo la de la variante Delta, mejor conocida como la variante de la India, en el Estado existe ya un porcentaje bajo de la nueva mutación del virus.
Aunque el funcionario estatal no cuantificó los casos que se han reportado, señaló que estos no se han presentado en niños, es decir, la variante Épsilon está afectando a los adultos.
“En Tlaxcala tenemos circulando, en gran cantidad, Delta que es nuestro principal problema, posteriormente tenemos Épsilon circulando; en los niños tenemos la cepa original afortunadamente”, expuso.
Aunque no dio más detalles, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante Épsilon, también llamada californiana o B.1.427/B.1.429, se ha registrado en 44 países fuera de su lugar de origen (California) y hasta ahora, pese a su rápida expansión, se considera solo “de interés” y no “de preocupación”, como Delta, por ejemplo.
Sin embargo, lo que la hace estar dentro de la observación es que es más contagiosa, pues presenta alrededor de un 20 por ciento (%) más capacidad para contagiar a personas sanas y los investigadores creen que podría tener un potencial aún más mortífero.
Además, el SarsCov-2 de la variante Épsilon tiene una importante capacidad de resistir a las vacunas contra el coronavirus, los científicos consideran que tiene hasta 3.5 veces más resistencia a los anticuerpos de vacunas como Moderna y Pfizer.
Es decir, que la variante Épsilon reduce hasta 3.5 veces la potencia neutralizadora de los anticuerpos inducidos por las vacunas ARN mensajero, así como de los adquiridos por personas que ya tuvieron Covid-19, de acuerdo con la investigación.