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También las hijas recibieron flores en los panteones

  • Este año y como consecuencia de la pandemia que ha quitado la vida a mujeres jóvenes, el 10 de mayo tocó a sus padres e hijos llevarles flores

Este 10 de mayo, no solo los hijos llevaron flores a los panteones para sus mamás fallecidas, las condiciones que desde marzo de 2020 se viven a nivel mundial y que han afectado a Tlaxcala provocaron que los papás fueran quienes también llevaron flores a sus hijas.

Como consecuencia de la pandemia que ha arrebatado la vida a cientos de tlaxcaltecas y, entre ellos madres de familia jóvenes, este Día de las Madres fue un tanto diferente, pues en los camposantos pudieron verse a los abuelos llevando a sus nietos a visitar, por primera vez, la tumba de sus mamás.

Doña Rosario y su esposo, Carlos, pareja de 65 y 67 años, llegaron acompañados de su nieto de 4 años a llevar flores a la tumba de Angélica, su hija, una mujer que falleció a los 35 años en julio pasado a causa del Covid-19, ella no pudo quedarse en casa y tenía que salir a trabajar todos los días para llevar el sustento a la casa, hasta que se contagió y falleció.

A decir de Rosario, su nieto quedó en orfandad, y aunque ahora es cuidado por su tía, la hermana de Angélica, y convive con sus primos, su mamá está bien presente y todos los días reza para que ella lo cuide desde el cielo, allá con Dios, dice.

Angélica era madre soltera y la única de tres hermanos que vivía con sus papás, pero cuando se enfermó de coronavirus tuvo que ser aislada y fue desde entonces que su hijo no la volvió a ver.

Con los ojos llorosos, los abuelos contaron que el niño no asimila aún la partida de su mamá, sin embargo, llevarlo al panteón para que visite a la mujer que le dio la vida será, de ahora en adelante, uno de los recuerdos quizás más dolorosos que tengan de la pandemia.

En otros casos, los esposos acudieron solos a visitar a sus esposas fallecidas, los hijos a sus madres y los nietos a sus abuelas, para muchos ayer fue la primera vez y otros prefirieron no asistir, pues el coronavirus ha sido trágico que, por temor o precaución, prefieren asistir otro día cuando no haya muchas personas y exista menor riesgo de contagios.