Por primera vez se queda el PRI sin representación en el legislativo
Con la renuncia de Blanca Águila al PRI, la bancada tricolor despareció del Congreso, algo nunca visto en 65 legislaturas
Por primera vez, un partido político con presencia en Tlaxcala se quedó sin representación en el poder legislativo, hecho que marca un precedente en la historia local y que podría repercutir en el ámbito nacional, como un ejemplo para la política moderna.
Desde el 6 de septiembre, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), uno de los más longevos en el Estado, perdió a su única diputada local: Blanca Águila Lima, quien llegó a la curul por la vía plurinominal y quien renunció tras acusar violencia política y de género y de señalar que el tricolor ha traicionado sus ideales.
El PRI había sufrido un notorio golpe político en las elecciones del 2 de junio, al no lograr ningún triunfo para el poder legislativo y al únicamente lograr quedarse con una curul gracias al principio de representación proporcional.
Sin embargo y una semana después de la toma de protesta de la nueva legislatura, el primer movimiento fue de Águila Lima para renunciar y, con ello, desaparecer a su propia bancada.
En una rueda de prensa, la legisladora señaló que su decisión se basa en la decepción que siente hacia el partido, el cual, subrayó, ha dejado de representar a las verdaderas demandas del pueblo.
“Esta decisión no ha sido fácil, pues he dedicado años de trabajo y esfuerzo a esta institución, creyendo en los ideales que en su momento hicieron del PRI un pilar de la política en nuestro país. Sin embargo, hay momentos en los que se debe priorizar la congruencia, la ética y el compromiso con la sociedad por encima de cualquier afiliación política”, indicó.
Además, Blanca Águila Lima reveló que “como mujer, como política, y como ser humano, he enfrentado ataques que no solo han buscado menoscabar mi trabajo y mi integridad, sino que representan una afrenta a todas las mujeres que luchan por un espacio en la vida pública. La igualdad y el respeto deben ser fundamentales en cualquier organización política, y lamentablemente, eso no lo encontré en los últimos tiempos al interior de este partido», afirmó.
Aseguró que, aunque deja el PRI, no abandonará la vida pública y seguirá luchando por los derechos de los más vulnerables, pero desde otros espacios políticos.
Con su renuncia, Blanca Águila Lima se suma a una creciente lista de políticos que han decidido romper con el PRI en los últimos meses, argumentando la pérdida de rumbo de la organización.