Por no tener condiciones óptimas, PC clausura CERTEZA, clínica de hemodiálisis en Tlaxcala
La empresa contratada por el IMSS para brindar servicio a enfermos renales no ha capacitado a su personal, tampoco tiene dictámenes de protección civil
La clínica fue abierta tras firmar un convenio para devolver la atención ciudadana, pero la empresa tiene el compromiso de subsanar las observaciones o nuevamente habrá problemas
Por no contar con dictámenes y no capacitar a su personal, la Coordinación Estatal de Protección Civil colocó sellos de clausura a la clínica de hemodiálisis CERTEZA, ubicada en la comunidad de La Candelaria Teotlalpan en el municipio de Totolac, misma que brinda servicios a enfermos renales afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El coordinador estatal de protección civil, Juvencio Nieto Galicia, explicó que la clínica tuvo más de tres semanas para ponerse al corriente desde que se realizó una primera visita hasta que se ordenó la suspensión, por lo que la acción derivó en el cumplimiento de la ley.
“La clínica no tiene dictámenes de protección civil, es decir que no cumple con las normas en cuanto a rutas y salidas de emergencia, un plan de acciones en caso de un siniestro como incendio o sismo, dictamen de evaluación estructural, dictamen de instalaciones eléctricas entre otros, además de que no presentó las capacitaciones que recibe el personal que atiende a los enfermos”, dijo en entrevista telefónica.
La suspensión de actividades de la clínica afectó a más de 500 de las mil personas que reciben tratamiento de hemodiálisis al día, por lo que un grupo de pacientes se apostó en la entrada en espera de que el servicio se restableciera, con la consigna de que la empresa CERTEZA tenía que garantizar la atención, pues el contrato con los derechohabientes dice que, en casos en que la clínica no pueda brindar el servicio por motivos ajenos a los beneficiarios, se hará responsable de canalizarlos a donde les puedan atender, o bien, reembolsarles el costo del tratamiento en otro lugar.
“Estamos aquí desde las seis y media de la mañana, no podemos darnos ese lujo de quedarnos sin hemodiálisis porque la última que nos hicieron fue el sábado, si no la tenemos hoy nuestro cuerpo comienza a manifestarlo, yo ya me estoy hinchando, luego las toxinas se verán en mi piel y si no me atiendo pronto se me puede hacer una infección que me llevará a internarme en el hospital; en los casos más graves puedes perder la vida si no te atiendes pronto, hablo de un día o dos máximo”, dijo uno de los afectados.
La clausura se mantuvo desde la mañana, cuando los primeros enfermos comenzaron a llegar, hasta casi las 16:00 horas, cuando luego de firmar el convenio de cumplimiento, CERTEZA y la CEPC acordaron que no podían detener la atención a los enfermos renales, puesto que cada retraso en la hemodiálisis significa poner en riesgo la vida de los tlaxcaltecas.
La apertura de la clínica fue para que no se retrase más el servicio hacia los asegurados, pero eso no exime a CERTEZA de cumplir con los lineamientos de Protección Civil, es decir, que deberán ponerse al corriente a la brevedad para evitar problemas futuros.