PLANTEAN INCORPORAR LENGUAJE INCLUYENTE EN EL CÓDIGO CIVIL
- Aseguran que, a través del lenguaje, se ha naturalizado la discriminación y la desigualdad que históricamente ha existido entre mujeres y hombres.
Por José Luis Ramírez Romero
A fin de hacer un uso adecuado del lenguaje incluyente al referirse a personas, grupos y colectivos, el diputado Vicente Morales Pérez (Morena) propuso reformar diversos artículos del Código Civil estatal.
En la sesión de este martes, destacó la importancia de incorporar un lenguaje incluyente en toda la legislación, a efecto de que se visibilice y nombre de manera adecuada a las personas y los grupos en situación de discriminación.
Por ello, consideró pertinente utilizar de manera correcta los genéricos tanto en masculino como en femenino, “eliminando el uso exclusivo del masculino y respetando las normas gramaticales, para que todas y todos puedan ser nombrados y nombradas, así como considerados y consideradas de una manera respetuosa y digna, libre de prejuicios, estigmas y discriminación”.
De acuerdo al legislador, en los últimos años se han elaborado en México leyes y políticas para propiciar el reconocimiento y la garantía de los derechos humanos, como parte de la lucha para acceder a una vida libre de violencia en la sociedad.
Sin embargo, advirtió que aún existen rezagos para lograr ese pleno ejercicio de derechos, pues “una de las causas principales es la reproducción del lenguaje sexista, excluyente y discriminador en diversos sectores y ámbitos de la vida cotidiana, sin identificar que es precisamente el lenguaje la herramienta en la que se asienta la violencia”.
Cabe mencionar que, durante la sesión ordinaria, el legislador José Gilberto Temoltzin Martínez (PAN) también planteó reformar el Código Civil para incorporar el Capítulo III Bis con la figura jurídica “De la hipoteca inversa”, a fin de crear una alternativa de ingresos que complemente las pensiones o jubilaciones de los adultos mayores.
Así, se pretende que la propiedad de los bienes inmuebles se mantenga a favor de los titulares, quienes podrán usarlos como habitación mientras vivan o bien rentarlos previa autorización del acreedor o pensionario, y disponer de ella en testamento.
Con este tipo de pensión, se busca que los adultos mayores logren una mejor calidad de vida, al inhibir su estado de vulnerabilidad por sus bajos recursos o condición de abandono.