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Pese a riesgo de Ómicron, cumplen Reyes Magos en hogares Tlaxcaltecas

  • La afluencia de personas en tiendas, centros comerciales y mercados, propiciaron la posible propagación del virus; no hacer compras anticipadas podría tener consecuencias

A pesar de las condiciones sanitarias que prevalecen en la entidad, luego de la presencia de la variante Ómicron del Covid-19 en Tlaxcala, y aún con el riesgo de contraer la enfermedad en las calles, los Reyes Magos cumplieron cabalmente su tarea en los hogares tlaxcaltecas.

La afluencia de personas desde la mañana de ayer en centros comerciales, tiendas departamentales, supermercados, mercados, tianguis y calles propició la propagación del virus, sin embargo, esto no fue impedimento para que hoy miles de pequeños hayan recibido un regalo.

Los Reyes Magos y sus ayudantes salieron con el objetivo de llevar ilusión y alegría a las casas, y aunque con las medidas pertinentes, en algunos casos fue imposible respetar todos los protocolos que el Consejo Estatal de Salud ha dictado con anterioridad, como el respeto de la sana distancia.

En parte, no realizar compras con anticipación fue una de las causas que generó la saturación de espacios, aunque, por otro lado, los comerciantes no tenían mucho que ofrecer sino hasta el inicio de esta semana.

Magaly, ayudante de los Reyes Magos, dijo entrevistada por ABC Tlaxcala que no había podido encontrar lo que su hijo pidió en su carta, sino hasta ayer por la mañana que acudió a uno de los puestos temporales que se instalaron en el mercado capitalino, ese fue el motivo por el que tuvo que realizar compras de último momento.

José Luis, padre de familia, decidió apoyar a Melchor, gaspar y Baltazar a través de un supermercado, él asentó que por su trabajo no había podido salir a comprar y el fin de semana había pocos artículos en el área de juguetería, ya que en esos lugares también reservan gran parte de su mercancía para el 5 de enero.

En la capital, al igual que en algunos municipios, las calles céntricas se vieron repletas de personas, algunas buscando juguetes y ropa y otras para llevar a su hogar la tradicional rosca de reyes, que se comparte en familia.

En esta ocasión, aunque la afluencia fue basta, los comerciantes no vendieron lo esperado, pues también hubo quienes por su economía desgastada, tendrán que esperar al próximo año para llevar un regalo a sus hijos, tomando en cuenta que las condiciones por la pandemia no han sido óptimas desde hace ya un año y 9 meses, previniendo, al mismo tiempo, ser portadores del virus al salir a las calles para adquirir algún producto.