México y Cuba rinden homenaje al Bolero, patrimonio cultural de la humanidad
- Cantantes de ambas naciones celebraron la distinción de la Unesco con un emotivo concierto
Este sábado 20 de julio se llevó a cabo el concierto La fiesta del Bolero de México y Cuba para el mundopara celebrar la inscripción de este género musical en Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
En la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes se realizó una ceremonia que fue presidida por la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero; la presidenta del Instituto Cubano de la Música, Indira Fajardo Ramírez, en representación del ministro de Cultura de Cuba, Alpidio Alonso Grau; la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), Lucina Jiménez López; el representante permanente de México ante la Unesco 2019-2024, embajador Juan José Bremer de Martino; la coordinadora del proyecto de Inscripción del Bolero como Patrimonio Cultural Inmaterial de México 2018 y de la Humanidad de la Unesco 2023, Cecilia Tapia Margaona; el director general de Canal 22, Pável Granados Chaparro; y el presidente ejecutivo del Instituto de Preservación y Fomento del Bolero en México, AC, Marco Antonio Lugo Rubio.
La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, ofreció un discurso emotivo, enfatizando la importancia del Bolero en la cultura de México y Cuba: “El Bolero nos ayuda a cantar dolores, a entender el mundo. La música de Bolero es amistad, medicina, camino, memoria. Gracias a los compositores de antes, de ayer y de mañana; gracias, Cuba, por darnos el Bolero; gracias, México por cuidarlo”.
Como parte del programa en esta celebración se presentó un video que narró el proceso para la aprobación de la candidatura binacional del Bolero entre México y Cuba por el más importante organismo cultural internacional que destacó la relevancia del Bolero como práctica cultural.
Fue Pável Granados Chaparro quien iniciando con una grabación de Ana María Fernández, la primera persona en México en cantar Boleros, creó un puente musical entre épocas al reseñar: «Suele decirse que el Bolero es una cadencia sobre la que se mecen las olas del mar, pero es en realidad las olas de todos los mares (…) tiene raíces en Europa, en África y hasta en las lejanas islas del sureste asiático (…) Hoy es una realidad el plan de salvaguarda que México y Cuba han puesto en práctica y que en estos momentos garantiza la permanencia del Bolero (…) Tenemos que gritar con mucha alegría ‘Que viva el bolero’», destacó Granados.
Posteriormente se presentó un segundo video, el cual se centró en el proceso de inscripción del Bolero en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco. Este documento audiovisual fue complementado con palabras de Cecilia Tapia Margaona, en el cual destacó la importancia de la comunidad para mantener el patrimonio cultural. “De la comunidad de portadores del Bolero vemos a algunos artistas, músicos, ejecutantes e intérpretes en el escenario, y agradecemos que le den visibilidad y lo mantengan vivo”.
Por su parte, Marco Antonio Lugo Rubio destacó el trabajo de todos los colaboradores que hicieron posible la inscripción, así mismo se refirió a la relación entre Cuba y México, principalmente por una pertenencia dual gracias al Bolero. “Estando en México, ha sido nuestro mejor copiloto Cuba y sus grandes valores, y en Cuba el copiloto es México, porque como dijo alguna vez José Martí: ‘Creo que México y Cuba son las dos alas del mismo pájaro’, (…) qué bonito es tener un corazón, que no sabemos si el ventrículo derecho es el de Cuba y el izquierdo México o a la inversa, pero el corazón en total lo ha dibujado la música y el mensaje maravilloso de lo que nos une: el Bolero.”
El embajador Juan José Bremer de Martino enfatizó la importancia del certificado instaurado por la Unesco, así como el propio concierto que honra al género. “Hemos logrado este registro de la mano de Cuba y el certificado que nos dio la Unesco, al aprobar los miembros del Comité del Patrimonio Inmaterial, unánimemente, el registro del Bolero es el mejor testimonio de la fraternidad cultural de Cuba y México”.
Acto seguido, el embajador hizo entrega del certificado a la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, y a la presidenta del Instituto Cubano de la Música, Indira Fajardo Ramírez.
“Los portadores han sido protagonistas esenciales de esta declaratoria, si bien las instituciones también hemos colaborado con todo el expediente, sin duda, tener al Bolero y su práctica entre el pueblo es lo más significativo”. Fueron las palabras que ofreció Indira Fajardo Ramírez, en representación del ministro de Cultura de Cuba, Alpidio Alonso Grau.
De esta forma se dio paso a la gala, cuya dirección musical estuvo a cargo de Rosino Serrano, la cual contó con la participación de representantes nacionales y cubanos del Bolero, de entre los que se encuentran Eugenia León, Regina Orozco, Tania Libertad, Argelia Fragoso, Jorge “Coque” Muñiz, Eduardo Sosa y Sergio Farías, entre otros.
Asimismo, estuvieron presentes intérpretes contemporáneos quienes ofrecieron una visión fresca del género, que confirman la importancia del Bolero y la trascendencia por generaciones; entre estos se encontraron Las Hermanas García, Los Miranda y La Marisoul, además del trabajo de la Orquesta Escuela Carlos Chávez del Sistema Nacional de Fomento Musical, bajo la dirección de Roberto Rentería Yrene.
Los temas que esta nueva generación de intérpretes de Bolero mostró en su repertorio fueron: Sabor a mí, Seguiré mi viaje, Noche no te vayas, El reloj, La barca, Historia de un amor y Perfume de gardenias.
El programa se centró en la preservación de canciones de algunos de los compositores más representativos de México y Cuba; siendo esta una forma de seguir con la tradición sonora, reconociendo el hito que son dichas piezas.
Para destacar el sentimiento de colaboración, las voces compartieron temas, ofreciendo duetos y colaboraciones únicas, algunos de estos fueron Eugenia León que interpretó Nadie, con Pepe Rivero, y un popurrí con Jair Alcalá; por su parte, Tania Libertad se unió con Los Macorinos para Urge; y Argelia Fragoso, La Marisoul y Regina Orozco ofrecieron su versión de Historia de un amor.
Por otra parte, uno de los datos a destacar son los arreglos con los que algunas de las canciones contaron, ya que estos detalles muestran versiones que de forma sutil proponen nuevas formas de escuchar las piezas clásicas del género.
Entre los maestros arreglistas se encuentran Miguel Villicaña en Tristezas; Chucho Ferrer en Bésame mucho junto a Rosino Serrano, este último compartiendo trabajo también con Enrique Nery enNadie, y trabajando en solitario en arreglos para Voy a apagar la luz y el Popurrí Bolero ranchero, por mencionar algunos.
Entre aplausos y ovaciones, las y los intérpretes dirigieron la velada a un ambiente lleno de amor, nostalgia y tradición musical a través de canciones que han sido parte de las tradiciones culturales de México y Cuba.