Madre acusa discriminación escolar, escuela responde

• La mujer expuso que su hija no es recibida en la escuela y la rechazan por estar recién operada, la directora de la institución dice que el parte médico indica que la recuperación es de más de medio año

Una madre de familia de la secundaria técnica número 33 de la comunidad de San Jorge Tezoquipan, en el municipio de Panotla, acusó discriminación hacia su hija por parte de la directora de la institución, señalando que desde mayo evitó que la menor se integrara a clases por tener una discapacidad y llevar aparatos funcionales.

La tutora expuso que la profesora se excusó argumentando que la escuela no tiene las condiciones estructurales para brindar el apoyo necesario a la estudiante, y que lo mejor sería que no acudiera hasta que su problema de salud mejore, tomando esto como un acto de rechazo que fue expuesto ante la comisión de derechos humanos.

Hace unos días el caso se reavivó cuando la denunciante expresó que existe una violación a su derecho de recibir una educación sin distinción, ya que presuntamente la directora ha tomado represalias y recibió a la alumna, pero con la condición de que ingrese y salga del plantel después de que lo hagan los demás estudiantes y no salga del salón durante el receso.

“Como si su castigo fuera tener una discapacidad”, dijo la madre de familia.

Por este motivo, la mujer se manifestó afuera de la institución portando una cartulina en donde expresó su inconformidad, y a través de sus redes sociales solicitó la ayuda ciudadana para que el mensaje llegara al secretario de educación, Homero Meneses Hernández.

En respuesta, autoridades escolares y de la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE), señalaron que lo que están haciendo no se trata de un caso de discriminación o violencia, como la tutora lo planteó, sino que lo que realmente se busca es proteger la salud de la niña y que no vaya a sufrir algún percance durante su estancia en clases.

Dieron a conocer que la alumna fue sometida a una cirugía para tratar de corregir el problema que padece, motivo por el cual utilizaba un sistema mecánico que le ayudaría a mejorar su postura y se apoya en unas muletas, pero el tiempo de recuperación, de acuerdo con el parte médico, es de entre medio año y ocho meses.

Por esa causa la estudiante no fue recibida en mayo, cuando su madre insistió en que se reintegrara al aula con sus compañeros, y ahora, con el inicio del ciclo escolar, es arriesgado que asista sin que el especialista determine que ya puede hacerlo sin problema.

La escuela ha ofrecido el sistema de clases en línea, para evitar el retraso de la menor en el plan educativo, pero al parecer la madre se ha negado.

Las autoridades educativas determinaron entonces que la mujer acredite que su hija ya puede asistir a clases sin problemas, aclarando que no le están negando la educación, sino que debe haber condiciones para que pueda recibirla sin correr ningún riesgo.