Bordadoras quieren conservar tradición del Manto de la Virgen de la Caridad
Esperan instrucciones para comenzar su elaboración, aunque por las fechas será sencillo y diferente a los demás
Mujeres que año con año bordan el vestido y el manto de la Virgen de la Caridad, en Huamantla, y que la imagen estrena la noche del 14 de agosto previo a la salida por las calles en la tradicional “Noche que Nadie Duerme”, no quieren que este año se interrumpa esa costumbre.
Representadas por Elvira Hernández, hablaron con el párroco de la Basílica Nuestra Señora de la Asunción para solicitar, luego de la decisión del Obispo de Tlaxcala, que las dejara bordar un manto sencillo para colocárselo a la Virgen el día que se debería celebrar, y hasta ahora están esperando una respuesta.
El acuerdo, dijo la artesana en una entrevista telefónica, es que será un manto con aplicaciones, cada una de las mujeres que participan bordará una parte en su hogar, para no exponerse durante la contingencia, y al filan todas las partes se unirán en una sola prenda.
El acuerdo también consiste en que el día que lo entreguen sólo habrá tres o cuatro personas para colocarlo, no se hará de manera pública como cada año y tampoco será ostentoso, pues la Diócesis tlaxcalteca ha decidido que este 2020 la Virgen de la Caridad no saldrá de su nicho para recorrer las calles adornadas con alfombras de aserrín durante la noche.
“Ya hablamos con el Padre Raymundo, el también ya le comunicó al Obispo sobre nuestras intenciones y estamos esperando las respuestas, estamos esperando que nos digan cuándo empezar, aunque sabemos que por los tiempos será difícil hacer un manto con muchos detalles”, explicó.
Dijo incluso que aún no tienen definido un diseño con exactitud, pero no pierden la esperanza de que las autoridades de la iglesia les permitan respetar la tradición y cumplir, en tiempo, con cambiar el vestido el 14 de agosto por la noche.
Elvira Hernández y su hermana, herederas de la tradición de “Doña Carito”, mujer que por más de medio siglo estuvo al frente de los trabajos del atuendo de la Virgen, tienen esperanzas de que este año la patrona de Huamantla también tenga un vestido nuevo.
“Desde el año pasado nos dedicamos a conseguir los materiales para el mano de este año, la familia que lo donará pudo conseguir algunos materiales, pero otros ya no, es que vienen de Francia y con el cierre de las fronteras todo se complicó”, expuso.
Normalmente, el manto de la Virgen de la Caridad comienza a bordarse desde mayo, unas 50 mujeres intervienen para su elaboración, y aunque en años recientes el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH recomendó reducir el peso que se coloca sobre la cabeza de la imagen para conservarla en buen estado, sigue estando lleno de detalles a mano cosidos con hilos de oro, canutillo y otros materiales sobre tela de seda.
