Basura interpretativa
De viva voz…
Víctor García Lozano
La facilidad del escandalo genera muchas confusiones. Poco se hace por compilar y analizar los datos, antes de comenzar a hacer las interpretaciones y mal informar. El problema de la basura tiene varios puntos a analizar, pero ya algunos vuelan pensando que habrá camiones de basura de empresas privadas por los municipios a razón de negocios millonarios desde las entrañas del poder.
De inicio, hay un problema que no acepta controversias, que es el origen de una búsqueda de soluciones y se esta perdiendo de vista: los cuatro rellenos sanitarios del estado,que reciben mil 150 toneladas diarias de los 60 municipios,están rebasados en su capacidad; agotados en su vida útil.
Desde hace años no cumplen con la Norma Oficial Mexicana y siguen contaminando los mantos acuíferos con residuos de lixiviados, debido a la carencia de geomembrana, necesaria para evitar la filtración de líquidos contaminantes, lo cual fue observado por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
Además de contaminar el aire por estar a cielo abierto al ya no contar con cubiertas. Un problema no solo medio ambiental, sino también de salud, por la contaminación de mantos acuíferos y el aire.
La única solución es realizar nuevos centros de disposición final de la basura. Pero la Secretaría del Medio Ambiente(SMA) informó desde hace dos años que no había un presupuesto municipal ni estatal para atender la disposición de la basura que generan los tlaxcaltecas.
Aquí empieza la confusión, este de inicio es un asunto de responsabilidad de los municipios. Estos tienen la obligación constitucional de la disposición de sus residuos y de tratarlos. Por otra parte, la instalación de Centros de Transferencia municipales es, sin embargo, un sueño; ningún ayuntamiento cuenta con el presupuesto para invertir en uno.
El gobierno estatal por su parte buscando soluciones conjuntas, atiende la necesidad que tiene el estado de nuevos centros de disposición final de la basura, ajustándose a la circunstancia que los municipios no cuentan con la capacidad financiera para ello.
Pero para que el poder ejecutivo invierta en nuevos rellenos sanitarios se necesita proyectar a largo plazo. Es decir, si se harán inversiones considerables de cientos de millones debe haber una programación presupuestaria que cuente asimismo con la aportación de largo plazo de los municipios que serán beneficiados al no tener que hacer sus propios rellenos, a cambio de la retención de participaciones federales por 20 años.
Ha circulado en medios la carta que se “obligo” a firmar a los alcaldes dirigida a la SMA. Ahí precisamente solo se lee que están conscientes del problema de la disposición final de residuos y que no cuentan con la capacidad operativa ni presupuestal para dar el servicio directamente; que colaboraran con la clausura de los actuales rellenos y la implementación de soluciones.
Aquí es donde se agrava la confusión de los analistas, puesto que nunca se está hablando del servicio de recolección de basura y traslado a sitios de disposición final. Además, que estos servicios son constitucionalmente obligación de los municipios, como el mismo de la disposición final, seguirán siendo de atención de los ayuntamientos; nunca se mencionan en la carta citada.
No obstante, los fantasmas se apoderan de sus mentes. Asimismo, pierden de vista que el mismo servicio de disposición final desde hace 40 años lo da en colaboración el gobierno del estado, realizándose la retención de aportaciones federales de manera anual a los municipios.
En tanto, queda esperar que el gobierno haga un pronunciamiento sobre alternativas de solución al problema, antes que seguir especulando y desinformando.