Aprovechan sequía para ampliar propiedades en laguna de Acuitlapilco

• Ribereños han comenzado nuevamente a hacer uso de la zona federal reclamando sus supuestos terrenos; derriban árboles y queman pastizales para adueñarse

Vecinos de las comunidades y cabeceras municipales que colindan con la laguna de Acuitlapilco han aprovechado los meses de sequía y que el nivel del agua disminuyó, para adueñarse de terrenos o ampliar sus propiedades, invadiendo incluso la zona federal.

Una vez más, tal como sucedió hace aproximadamente dos décadas, los ribereños han comenzado a hacer un mal uso de la zona argumentado que tienen los documentos legales que los acreditan como dueños, por eso ya comenzaron a derribar árboles y quemar pastizales donde aves locales y migratorias anidan reclamando “lo que es suyo”.

Otros, en tanto, pretenden instalar campos de fútbol que hasta el año pasado se encontraban inundados, sin importarles dañar el ecosistema del segundo humedal más importante del Estado de Tlaxcala, alegando que es poco probable que la laguna se vuelva a recuperar.

Y es que, valiéndose de presuntas escrituras otorgadas hace aproximadamente 30 años o más, donde se especifica que varios terrenos “colindan con espejo de agua”, los colonos aprovechan el error de quien otorgó esos documentos y hacen valer lo escrito, por lo que cuando el agua disminuye su nivel los terrenos crecen.

De este modo, las propiedades de varios ribereños se han extendido hasta casi 100 metros hacia lo largo sin que nadie les diga nada, en tanto las autoridades federales no tengan ya concluida la delimitación territorial de la laguna y exista un decreto para su protección.

Actualmente, tan solo en lo que corresponde a la comunidad de Acuitlapilco, son unas cinco personas las que ya sacaron provecho de la sequía de este año; en una zona se puede ver incluso que maquinaria pesada ya removió plantas y árboles sin autorización.

Además, dos campos deportivos que se habían construido hace varios años, cuando la laguna se secó casi en su totalidad, ya están al descubierto, por lo que no se descarta que próximamente sean nuevamente utilizados y que, como la vez pasada, los encargados de las ligas de fútbol se opongan a que se retiren por invadir la zona protegida.

En Atlahapa y Tlacochcalco, comunidades pertenecientes a la capital y a Tepeyanco, respectivamente, también existen quejas de lugareños que pretenden apropiarse de terrenos de la laguna, recordando que cuando el agua retomó su nivel, luego de la sequía de inicios de este siglo, campos donde sembraban nopal y una vivienda en construcción quedaron bajo el agua.