Agua se filtró a la cisterna, justifican en gasolinera de Zacatelco
Afectados se quejaron porque la PROFECO no atendió las quejas, a pesar de más de 30 vehículos descompuestos nadie sancionó a la estación de servicio pero pudo haber pagado más de un millón de pesos
Miguel Ángel Lara
“Fue agua que con las recientes precipitaciones pluviales logró filtrarse a las cisternas donde almacenan el combustible, eso provocó que la gasolina llegara contaminada hasta las bombas despachadoras”. Esa fue la justificación que los responsables de la estación de servicio de Zacatelco dieron a los usuarios, luego de que el fin de semana por lo menos 30 automóviles resultaron afectados.
A pesar de que los conductores que vieron como sus automóviles se descompusieron solicitaron a través de las redes sociales la intervención de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), el organismo que desde hace tiempo atiende a Tlaxcala desde Puebla no se presentó.
Eso provocó que los empresarios pudieran llegar a acuerdos con los afectados que, en la necesidad de reparar su automóvil aceptaron las condiciones y al final la estación de servicio salió bien librada.
Y es que la gasolinería solo tendrá que pagar por la compostura de cada vehículo, que a decir de algunos tendrá un costo de entre mil y mil 500 pesos, es decir, la gasolinería pagará alrededor de 45 mil pesos, tomando en cuenta que se dañaron 30 unidades, y no la multa que PROFECO le pudo haber impuesto por vender combustible contaminado.
De acuerdo con algunos expertos, PROFECO pudo haber impuesto una sanción, solo por vender gasolina contaminada, de más de un millón de pesos, además de que la estación de servicio debió haber sido sometida a varios estudios, entre ellos el de la procedencia del combustible en el que incluso interviene el SAT.
Los tanques de almacenamiento de combustible deben tener sensores que detectan agua en la gasolina, por lo que no es factible la respuesta de los empresarios, además de que al momento en que se descarga la gasolina de las pipas debe haber un encargado de verificar que el combustible esté bien.
De no cumplir con esos requerimientos la gasolinería estaría violando algunas normas que ameritan sanciones, por lo que los afectados debieron interponer de inmediato la denuncia ante la PROFECO, no solamente ante la PGJE, y no esperar a que la encargada de velar por los intereses de los consumidores llegue a ver lo que sucedió.