CERESOS de Tlaxcala presentan deficiencias: CNDH
- Estas se dan principalmente en higiene, instalaciones, falta de seguridad y custodia
Aunque el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) hecho por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) califica a Tlaxcala con 8.10 puntos en los tres centros de Reinserción Social en el estado, ubicados en Apizaco, Tlaxcala y el femenil de Apizaco, estos tienen deficiencias en materia de reinserción social de los internos.
El reporte, emitido la semana pasada, expone que el Centro de Reinserción Social de Apizaco tiene una calificación de 8.20, el de Tlaxcala alcanza apenas el 7.8 y el femenil de Apizaco 8.3, con una tendencia satisfactoria.
Sin embargo, la CNDH detectó en la supervisión que es necesario prestar atención en los temas como la higiene en las instalaciones, la falta de seguridad y custodia y clasificación de las personas privadas de la libertad.
Sostiene que es necesario poner atención en materiales e higiene de instalaciones para alojar a las personas privadas de la libertad; asimismo, hay insuficiencias de personal de seguridad y custodia y dentro de la reinserción social de las personas hay una deficiente separación entre procesados y sentenciados, una inadecuada clasificación de las personas privadas de la libertad y una insuficiencia o inexistencia de actividades deportivas.
Los aspectos que garantizan la integridad de las personas privadas de la libertad en la distribución de personas privadas de la libertad; el número de personas privadas de la libertad con relación a la capacidad del centro; los programas para la prevención y atención de incidentes violentos; así como la supervisión del funcionamiento del centro por parte del titular.
En los aspectos que garantizan una estancia digna se detectó que existe la capacidad de instalaciones necesarias para el funcionamiento del centro; mientras que en las condiciones de gobernabilidad hay ausencia de funciones de autoridad por parte de personas privadas de la libertad del centro (autogobierno y gobierno); hay capacitación del personal penitenciario; hay inexistencia de actividades ilícitas; no existen cobros (extorsión y/o sobornos); hay una normatividad que rige al centro (reglamentos, manuales, lineamientos y disposiciones aplicables; su difusión y actualización); asimismo, hay un procedimiento para la imposición de las sanciones disciplinarias.
Dentro de la reinserción social de las personas privadas de la libertad detectaron que existe la integración del expediente técnico-jurídico, asimismo, existe la integración y funcionamiento del Comité Técnico y hay una organización y registros para el cumplimiento del plan actividades y dentro del grupo de personas privadas de la libertad con necesidades específicas hay programas para la prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria.
