Desinformación por Guillain-Barré afecta venta de pollo en la capital y Calpulalpan
- «La SESA dijo que investigarán dónde se compraron los productos que posiblemente provocaron casos en los municipios, pero ante la falta de resultados todos nos vemos afectados, la gente no le quiere comprar a nadie», dijeron comerciantes
Miguel Ángel Lara
La desinformación que existe en torno al síndrome de Guillain-Barré presente en Tlaxcala ha afectado las ventas de comerciantes de la capital y Calpulalpan, denunciaron.
Luego de que la Secretaría de Salud del Estado (SESA) emitiera la alerta sanitaria por casos de esta enfermedad detectados en los municipios de Tlaxcala, Santa Cruz Tlaxcala y Calpulalpan, principalmente, y se diera a conocer que las carnes serían un posible medio de contagio, los vendedores de estos productos han registrado bajas en sus ventas de hasta un 40 por ciento (%).
En la capital y Calpulalpan coincidieron al comentar que la falta de información certera, por parte de la SESA, ha pegado drásticamente a todos los vendedores, pues al bajar sus ventas el producto que compran tiende a echarse a perder, ocasionando graves pérdidas porque tienen que desecharlo.
“La SESA dijo que investigarán la causa real de la enfermedad, y en caso de que venga de la carne, principalmente la de pollo, también iban a investigar dónde se compró para emitir recomendaciones, pero como ya va más de una semana y no han dicho nada, ahora la gente no quiere comprarle a nadie”, dijeron en Calpulalpan.
En la capital sucede algo similar, los consumidores han preferido evitar la compra de carnes, sobre todo en el mercado, y confían más en la que se vende en los supermercados, que proviene de empresas certificadas y si se enferman sabrán a quién responsabilizar, aunque el producto venga congelado, y no de los puestos o locales pues no saben de dónde sacaron la carne.
“Viene la cuaresma y es una temporada alta para la venta de pollo, con la falta de información de la SESA vamos a tener pérdidas, si no dicen el origen de la enfermedad y si los casos siguen subiendo en Tlaxcala, al menos esta primera mitad del año será caótica para quienes vendemos pollo”, dijo una comerciante en la capital.
Mientras tanto, la SESA continúa sin ser clara en su información, está generando psicosis entre los tlaxcaltecas y también está provocando una mayor confusión en torno a la enfermedad que se ha propagado casi al triple en una semana.