«Ayúdate, que tal vez te ayudaré»

• La nueva filosofía del PAC, de cara al proceso electoral, es que si sus aspirantes quieren obtener las candidaturas deben trabajar y ganárselo, así, si pierden, no habrá otro responsable más que ellos mismos

“Ayúdate, que tal vez te ayudaré”, parece ser la nueva política del Partido Alianza Ciudadana (PAC) para elegir a sus posibles candidatos o, al menos, posibles representantes en los municipios y distritos electorales locales.

Y es que, con el inicio de los nombramientos de los que ahora se llaman “coordinadores estructurales”, parece ser que la filosofía es que si quieren obtener una candidatura pues tendrán que ganársela, pero no solo ganársela a través de su trabajo de convencimiento de la ciudadanía, sino también a través de la afiliación de nuevos militantes y el reforzamiento de las estructuras con más simpatizantes.

Es decir, “el que quiera azul celeste, que le cueste” y que se desgaste las suelas recorriendo las comunidades, los barrios y las colonias, que demuestre que va a aportar algo valioso al partido, que le meta capital (también capital político) y que sea un digno representante en las boletas.

Pero eso no acaba ahí, sino que es solo el comienzo, pues ante la baja representación en los municipios y, sobre todo, en la toma de decisiones desde el Congreso del Estado, y ante la probable pérdida del registro electoral, el PAC tiene que buscar culpables, y esos culpables serán, precisamente, sus propios coordinadores estructurales.

Lo explico: en términos más modernos, el algoritmo del PAC es que si quieres ser un candidato entonces vas a tener que hacer todo el trabajo de convencimiento, de reforzamiento de las estructuras ya existentes y de afiliación de nuevos miembros.

Luego de que ya tengas todo eso, podrías obtener el registro de la candidatura, pero recuerda que todo el trabajo que ya hiciste es el mismo con el que llegarás a la contienda electoral y, probablemente y si todo sale bien, a las votaciones.

Ahora bien, si todo falla, ¿el PAC que pierde? Nada, el partido no pierde nada, perderá el candidato porque entonces si no gana la elección significará que no hizo el trabajo suficiente para asegurar el triunfo o que alguien con más verbo le comió el mandado.

Si gana, ganará el partido, porque acuérdense que quien estará representado en el poder legislativo será el partido, no el diputado de manera individual, y en los municipios el que gana espacios o alcaldías es el partido, no los candidatos.

En el peor de los casos, si se pierde el registro en Tlaxcala, de nueva cuenta, los culpables serán los coordinadores estructurales, por no hacer el trabajo suficiente.

Así que, se ve fácil, se las están pintando color de rosa a los prospectos del PAC, pero en realidad tendrán mucho que hacer y solo, para lograrlo, les queda poquito más o poquito menos de un mes.