Estado

Sacando el cobre

  • Ni la posición política, ni el dinero, ni la familia, ni siquiera el fuero influyen, al final, para mostrar la verdadera personalidad, así como le sucedió a Alejandra Ramírez

Tantos años cuidando una reputación, una imagen, un apellido y hasta, si usted quiere, una investidura para que, al final y en un dos por tres, por el motivo que sea, se muestre el cobre y todo se venga abajo y lo único que quede sea la realidad… así como le pasó a la diputada, ahora expresidenta del PAC y excatedrática de la UATx, Alejandra Ramírez Ortíz.

Y es que queda claro que ni la posición política, ni el dinero, ni el cobijo de una de las familias más famosas e importantes de Tlaxcala, y ni siquiera el fuero por su cargo en el Congreso del Estado, influyeron, al final, para que tuviera clase y pensara dos veces las cosas antes de actuar.

Dicen algunos que fue por celos, o al menos eso se dejó entrever, pero lo que sí nos consta es que hubo una mujer que se nombró a sí misma la expareja del actual esposo de Alejandra Ramírez y que aseguró haber sido golpeada por ella, golpeada, demás, con saña.

No bastaron más que unos días para que hubiera respuestas y con ellas las consecuencias; el rector de la UATx, el tío de la niña problemática actuó y le dictó un severo castigo: la suspensión de sus actividades dentro de la máxima casa de estudios y la suspensión de las actividades en el Partido Alianza Ciudadana (PAC) para que la PGJE investigue.

Bueno, más que el castigo, imagine usted la cara que pondrá ahora en el Congreso del Estado la diputada integrante de la Comisión de Derechos Humanos, Grupos Vulnerables y Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes; ¿usted confiaría en una legisladora con tal curriculum?

Pero el asunto no para ahí, sino que la mujer presuntamente agredida por la diputada es también catedrática de la Facultad de Filosofía y Letras de la UATx, y lo que pedía era que su exmarido, el ahora esposo de Ramírez Ortíz, se pusiera al corriente con la pensión alimenticia, es decir, uno de los temas que la legisladora debería atender en el Curul.

En fin, era de esperarse, más tarde que temprano la verdad saldría a la luz, y aunque no con buenos términos y sí con una mujer agredida por otra mujer que se creyó con más derechos o, al menos, con mayor poder, todo comienza a alinearse para que se aplique la justicia.

Esto también nos sirve de oportunidad para comprender que desde las altas esferas de la sociedad y la política, hasta en los barrios más bajos, las calles y los arrabales, se cocinan los mismos guisos, obviamente con su propia sazón, pero eso sí, en una cazuela de cobre.