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Denuncian agresiones de trabajadoras del CAI a menores de edad

  • En un oficio dirigido a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, al Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF) y a la Comisión Estatal de Derechos Humanos señalaron a Juriana Angulo Flores como responsable de la Sala Maternal 2 de dar malos tratos a los menores

Isabel Polvo

Padres y madres de familia de menores inscritos en el Centro de Atención Infantil (CAI) del gobierno de Tlaxcala, evidenciaron mediante un oficio que sus hijos han sido víctimas de maltrato por parte de trabajadoras, y pese a que presentaron la queja y solicitudes a la directora Verónica Palacios de la Cruz ha minimizado la problemática y no ha mostrado interés para garantizar un sano desarrollo de los infantes, por lo que exigieron su pronta remoción.

A través de un documento dirigido a la mandataria estatal Lorena Cuéllar Cisneros, al Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF) y a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), los padres de familia inconformes señalaron como principal responsable de conductas agresivas hacia los menores de edad a Juriana Angulo Flores de la Sala Maternal 2, quien se conduce con  gritos, jaloneos al peinarlos y colocarles el mandil, golpes, golpeteos en las mesas de trabajo como método de disuasión maltrato y otras agresiones físicas.

De paso, evidenciaron la serie de irregularidades al interior del CAI, pues las personas encargadas del cuidado y resguardo de los infantes no llevan una debida higiene de los menores, al entregarlos a los padres de familia “con el pañal sucio, lo cual incurre en un acto de violencia hacia los menores, así como envió de las heces fecales de los niños en la ropa que se devuelve”.

Por si fuera poco, las trabajadoras ejercen presión física y psicológica en los procesos de desarrollo de habilidades; no realizan una alimentación adecuada pues las dietas generalizadas las incumplen hacen caso omiso de los requerimientos nutricionales sugeridos por especialistas “se otorgan productos que no nutren, cómo frutas enlatadas, harinas, embutidos, de acuerdo a los niveles de formación del CAI, cuyos planes de alimentación no toman en consideración aspectos fisiológicos de los niños”, lo que ha afectado su bienestar gastrointestinal y podría derivar en padecimientos graves como diabetes y desnutrición.

Mientras que en el área de enfermería ha condicionado la estancia de los menores en el Centro con argumentos empíricos, sin contar con profesionales de la salud certificados o especialistas “con base en la condición física de los menores”, pese a que han presentado certificados médicos que avalan la aptitud de los niños para asistir a clases, manifestaron en el oficio.

Por lo anterior, los alumnos del CAI han presentado secuelas, como el llanto continuo en su comportamiento a su ingreso y egreso.

Así también, solicitaron que las personas encargadas del cuidado y resguardo de los menores deben contar con los estudios, conocimientos actualizados, habilidades emocionales, sociales, pedagógicas, y la experiencia necesaria para realizar su labor de manera cabal y eficiente.

“Nos dirigimos a usted como autoridad competente y responsable de evaluar el desempeño de las funciones de las Direcciones y áreas administrativas a su cargo solicitando lleve a cabo la remoción inmediata de Juriana ángulo Flores, Mónica Sevilla Flores. personal a cargo de los infantes pertenecientes a la sala de Maternal 2, y de Verónica Palacios de la Cruz, directora del Centro de Atención Infantil y responsable del personal”.

Además de realizar una evaluación a todo el personal que labora en dicho Centro con la finalidad de tener la certeza de que cada una de las personas encargadas del cuidado y resguardo de los infantes cuente con los estudios, conocimientos actualizados (…) y la experiencia necesaria para realizar su labor de manera cabal y eficiente”.

A efecto de prevenir este tipo de agresiones, omisiones y actos constitutivos de discriminación, y de promover el trabajo conjunto con las autoridades para coadyuvar en la generación de acciones que mejoren la calidad de la educación de “nuestras hijas e hijos”.