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 “Articular la política demográfica al desarrollo”, uno de los retos del sexenio

  • La estructura poblacional se verá afectada sensiblemente en el mediano y largo plazo, de acuerdo a las proyecciones del CONAPO.
  • Para atender las demandas de la población, los retos de política pública se concentran en la educación, el ingreso y la asistencia social.

Por José Luis Ramírez Romero

A pesar de que, en Tlaxcala, la población en edad de trabajar es más numerosa que la población no trabajadora, en los próximos años se presentará una reducción de la oportunidad denominada “bono demográfico”.

Lo anterior, implica la necesidad, por parte de los gobiernos, de articular la dinámica demográfica con el desarrollo económico y proyectar un escenario prospectivo que permita avanzar en la instrumentación de políticas públicas para atender las demandas de la población.

En el año 2020, la población estuvo conformada por niños entre 0 y 11 años, quienes representaron el 20.54% del total; por adolescentes y jóvenes de 12 a 29 años, que participaron con el 30.67%; adultos de 30 a 64 años, que significaron el 39.83%, y el 7.40% de la población correspondió a personas de 65 años o más.

No obstante, esta estructura de la población se verá afectada sensiblemente en el mediano y largo plazo, según las proyecciones realizadas por el Consejo Nacional de Población (CONAPO).

Al analizar la evolución de los principales indicadores demográficos en el periodo 2021-2050, se observa que, de continuar la tendencia prevista, al año 2027, la tasa global de fecundidad se ubicará en 1.92 hijos por mujer en su vida reproductiva, y al 2050 en 1.7, con lo cual la tasa bruta de nacimiento disminuirá a 15.37% y 11.27%, respectivamente.

Asimismo, la esperanza de vida al nacimiento muestra una tendencia creciente, por lo que, en 2027, será de 76.26 años, y en el 2050 de 79.63 años, mientras que la razón de dependencia total, es decir, la proporción de personas inactivas que deberían ser solventadas económicamente por las personas activas, a partir del 2032, empezará a mostrar el efecto del envejecimiento, llegando a 53.18 de la población. Para 2027, esta sería de 48.98.

Con base en la prospectiva poblacional de la actual administración estatal, la población de 3 a 14 años disminuirá su participación relativa en la población total, representando aproximadamente el 14.6% al año 2050.

En términos generales, los principales retos en materia educativa serán atender las necesidades de la población de 3 a 5 años, impulsar la conclusión del ciclo de educación básica e incentivar el ingreso y permanencia en el nivel medio superior.

Por otra parte, según la estimación de los indicadores demográficos, para 2050, las personas de entre 15 y 29 años, representarán aproximadamente el 19.7% de la población total, y en este caso, el desafío será acercar a dicho grupo alternativas educativas de nivel medio y superior de calidad, acordes a las demandas del mercado de trabajo.

Asimismo, la población en edad laboral, comprendida en el segmento de 15 a 64 años, que representará en el 2050 aproximadamente el 65.6%, requerirá acceso a empleos dignos que cuenten con las prestaciones que les permitan tener una vida en retiro de calidad.

Finalmente, la población adulta mayor de 65 años y más, que en 2050 implicará el 16.4% de la población total, y constituye “un crecimiento exponencial respecto a los valores observados hasta la fecha”, exigirá de las autoridades proveerle de las condiciones de salud, bienestar, movilidad y en general fomentar el desarrollo integral, en especial para la población femenina, la cual se estima tenga una esperanza de vida al año 2050 de 82.53 años.

Es por lo anterior que la administración encabezada por la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros reconoce que uno de los objetivos de su sexenio será “articular la política demográfica al desarrollo”.

“El análisis de las tendencias de los principales indicadores demográficos debe orientar y sentar las bases para la formulación de las políticas públicas, tendientes a preparar al capital social, generar las condiciones que favorezcan su desarrollo en un contexto digno, así como atender las necesidades que una población cada vez más envejecida demanda al Estado”, añade su diagnóstico.