Municipios

Agradecen pobladores de Analco trabajo del ayuntamiento de Nativitas

  • Más de 40 años tuvieron que pasar para que las autoridades pavimentaran calles y dotaran de servicios a la comunidad, los ignoraban por ser una colonia pequeña

Habitantes de la comunidad de San Miguel Analco, en el municipio de Nativitas, agradecen el trabajo que el ayuntamiento ha llevado a cabo en aquella localidad, sobre todo el que tiene que ver con infraestructura urbana y servicios básicos, pues ese lugar era uno de los más abandonados de la demarcación.

Durante los cuatro años y poco más de 2 meses que el gobierno municipal ha trabajado, ha llevado diferentes obras que mejoran la calidad de vida de las personas, las más recientes son la pavimentación de la calle 5 de mayo y el alumbrado público en la entrada principal, puntos donde desde hace más de 40 años no se veía mejora por parte de las autoridades.

“Estamos bien agradecidos de que el presidente municipal nos escuchó de poner el adoquín para nuestra calle porque nos hacía mucha falta, este es el camino de las escuelas, el principal de la secundaria y el kínder y los niños en la temporada de lluvias luego no podían ni pasar, tenían que poner piedras para que pasaran”, dijeron vecinas.

Resaltaron que es lamentable que tuvieran que pasar más de cuatro décadas para que el gobierno municipal volteara los ojos hacia aquella colonia pues, a su decir, los habitantes de aquel lugar siempre estuvieron marginados porque colindan con el estado de Puebla y es un pueblo muy pequeño.

“Muchas gracias, ojalá y que venga otra vez el presidente porque queremos darle las gracias de manera personal, nos ha apoyado mucho y durante su gobierno no ha dejado desamparada a la comunidad de San Miguel Analco”, externaron.

Expusieron que el trabajo que el ayuntamiento actual ha realizado ha sido de gran ayuda para todos, por eso, si va a haber alguien que continúe los esfuerzos, habrán de apoyarlo para que la localidad de Analco como el municipio de Nativitas continúe el camino hacia el desarrollo y el progreso